DECIME QUE SE SIENTE...
Por tercera vez, el astro Lionel Messi no pudo completar el sueño de conquistar un Mundial.
- Río de Janeiro (AP)
- - Publicado: 14/7/2014 - 12:00 am
Rozó el trono, lo palpó, lo acarició, pero no se pudo sentar en él. Por tercera vez seguida, Lionel Messi se va de una copa mundial con la frustración a cuestas, aunque en Brasil llegó a la final.
Alemania se convirtió en la gran sombra negra de Argentina y de Messi, ya que resultó ser el verdugo de sus tres últimas eliminaciones, la más reciente de ellas ayer, cuando se impuso 1-0 en una prórroga en el estadio Maracaná.
A Messi, cuatro veces seguidas elegido el mejor jugador del planeta, otra vez le faltó un paso hacia la gloria eterna. Tanto a Messi como a millones de argentinos se les quedó atragantado un alarido festivo, que hubiese tenido el valor añadido de lograrlo en el patio de su enemigo futbolístico.
Cuando parecía que Messi podía sostener la esperanza de Argentina de volver a ganar un mundial, otra vez se posó una especie de hechizo negativo. Ni siquiera “La Pulga” pudo acabar con casi tres décadas de frustraciones, que se arrastran a nivel de selecciones mayores desde que Argentina ganó la Copa América de 1993 en Ecuador.
Messi se llevó el Balón de Oro en Brasil, pero no pudo embolsar la anhelada Copa Mundial, algo que sí alcanzó Diego Maradona cuando fue genio y figura de un equipo albiceleste campeón en México 1986. Argentina también fue campeón como anfitrión en 1978.
Con pocas palabras pero contundente, “La Pulga” demostró su tristeza, a pesar de su elección como el mejor jugador del torneo. “En estos momentos no me interesa nada”, dijo. “Solo queríamos llevar la copa al país”.
Messi lleva tres mundiales con la selección argentina, aunque en el primero, en 2006, apenas despuntaba como el genio que luego deslumbraría al planeta con el Barça.
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