Ser tortuguías
En esta columna quiero contarles una parte de mi vida muy especial, donde pude unir mi pasión por cuidar y pasar momentos en...
- Nilena Marín
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- - Publicado: 02/5/2017 - 12:00 am
En esta columna quiero contarles una parte de mi vida muy especial, donde pude unir mi pasión por cuidar y pasar momentos en la naturaleza con el trabajo de voluntariado y convertirme en miembro activo de la Fundación Tortuguías, trabajo que me llena de orgullo y satisfacción. El objetivo de la Fundación Tortuguías es educar y crear conciencia sobre la conservación de las tortugas marinas en Panamá, así como la protección, desarrollando proyectos en playa Cambutal, Tonosí, provincia de Los Santos, y en playa Punta Chame, provincia de Panamá Oeste.
En este espacio les hablo sobre lo que significa para mí ser tortuguías y, estoy segura de que todos mis compañeros de la fundación se sentirán identificados porque nos une la misma pasión, las mismas fuerzas, ganas de hacer un cambio, ser generadores de acciones positivas y proteger la fauna marina de nuestro querido Panamá.
Todo empezó hace 7 años, cuando descubrimos que uno de los reptiles más hermosos del planeta, las tortugas marinas, estaban siendo afectadas por las acciones del ser humano. La contaminación, la venta y consumo ilegal de su carne y huevos, los artículos hechos de su caparazón, entre otras amenazas, hacen que la tortuga marina esté en peligro crítico de extinción.
"Las tortugas marinas son parte de nuestra cultura, de nuestra esencia y de nuestra tierra". Así lo veo yo, son parte de mi país, el cual amo con locura, por eso no dudo en decir: "Soy tortuguías".
Ser tortuguías es meterle corazón y ganas a nuestra labor. Es ver crecer a comunidades, educar a la niñez y a la juventud, es ayudar a las tortugas a llegar al mar, es trabajo en equipo, con amor y cariño.
Ser tortuguías es entregar esfuerzo y entusiasmo para que las playas y zonas costeras luzcan más limpias, es -también- guiar a las empresas, las comunidades y los voluntarios para que se unan a la causa y sean parte de este gran sueño.
Ser tortuguías es hacer un trabajo que llena el alma y el espíritu. Es depositar toda nuestra energía a los objetivos de conservación de las tortugas marinas para así dejar un legado a las futuras generaciones.
Ser tortuguías -para mí -es parte de mi esencia y sé que para mis compañeros es igual, porque cuando se hace todo con amor y esfuerzo, todo sale bien y siempre existe un aprendizaje para ser mejores y construir un mejor mañana.
En fin, en Fundación Tortuguías somos conscientes de que falta mucho por hacer, pero cada paso que damos nos acerca más a nuestros sueños al lado de seres extraordinarios, empresas que apoyan, comunidades, entre otros, que no dudan en darnos la mano para trabajar con armonía y dedicación.
Gracias a todos quienes apoyan, cooperan, escriben y se interesan en la fundación. Sin ustedes nuestra labor no sería posible. Seguimos hacia adelante, luchando por nuestra meta de conservación. Juntos podemos hacer un mejor mañana. ¡Gracias por CREER!
Para información sobre la fundación escríbenos a: [email protected].
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