Daniela: 'se abren puertas'
Opina que eso ocurre si se camina de la mano de Dios, hay disciplina y se es perseverante.
- Rosalina Orocú Mojica
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- - Publicado: 31/12/2018 - 12:00 am
Diana Cristina Torres Wong, de ascendencia chino-panameña y salvadoreña, nació con buena estrella, pero lo más importante, ha sabido aquilatar el don que Dios le otorgó.
Está contenta porque con el aval del Banco Nacional de Panamá, inauguró en la Casa Museo de esta institución "Reflejos", su primera exposición individual, que consta de 28 cuadros de diversos formatos. Cuatro o cinco grandes, entre ellos el acrílico que da nombre a la muestra.
"Hecho con añil, producto hecho en El Salvador, la tierra de mi papá", dice.
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A la hora de los agradecimientos, el primero en la lista es Dios.
"El mérito es para Dios, estoy agradecida con Él", expresa.
Además, han tenido gran influencia en su vida personal y artística el pintor y escultor Juan Carlos Marcos, quien es su mentor, y el pintor y docente Digno Quintero, quien le dio clases de Teoría del Color en el colegio Brader, donde cursó estudios.
Torres Wong se siente afortunada porque tuvo la oportunidad de aprender los fundamentos del arte pictórico en Hong Kong, durante varios meses, como parte de los estudios de bachiller en Bellas Artes en Publicidad que cursa desde los 17 años en Savannah College or Art and Design (SCAD).
Su talento le valió ser becada por SCAD, que, explica, tiene su sede en Georgia, Estados Unidos, además de dos campus, uno de ellos en Hong Kong. También enseña online.
Vivir por su cuenta en Hong Kong y Estados Unidos siendo tan joven le ha ayudado a madurar y a ser independiente.
Su esfuerzo, trabajar diversas técnicas durante horas, hasta las 3:00 a.m. y 4:00 a.m., muchas veces, ha dado frutos.
"Ha sido difícil. Me ha ayudado mucho el apoyo emocional de mis padres. También provenir de una familia multiétnica", dice.
Maneja diversas técnicas: carboncillo, pastel, acuarela y acrílico.
Esta última le encanta, igual que trabajar rostros.
Etapas de su vida, eso reflejan sus cuadros. "Cuentan historias", dice.
Prefiere la noche para pintar, escuchando música acústica.
También disfruta de cocinar y ver documentales.
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