EU llama a derrotar "unidos" al terrorismo
El presidente iraquí, Sadam Hussein, ha amenazado con "destruir" el Estado de Qatar, si ese país permite a EU utilizar su territorio para atacar Irak.
- Islamabad
- - Publicado: 11/9/2002 - 11:00 pm
Estados Unidos llamó ayer a sus aliados a actuar "unidos y con resolución" para ganar la guerra contra el terrorismo y las armas de destrucción masiva, al tiempo que el secretario general de la OTAN alertaba de que "hay que estar listos" para afrontar la amenaza que representa ese armamento.
En lo que puede interpretarse como una tácita llamada a los aliados para que sigan a Washington en caso de una acción militar contra Irak, el embajador de EU ante la OTAN, Nicholas Burns, aseguró ayer que su país no quiere adoptar medidas unilaterales, aunque en ningún momento mencionó al régimen de Bagdad.
"Pese a nuestro imponente poder, no podemos actuar solos en el mundo. Necesitamos a nuestros amigos y especialmente, a nuestros aliados de la OTAN. Ni aislamiento ni unilateralismo podrán ser nunca el camino estadounidense", subrayó Burns.
El embajador del principal país de la Alianza Atlántica se pronunció así durante una solemne ceremonia en la sede de la organización militar en memoria de las víctimas de los ataques del 11 de septiembre. Asistieron los embajadores de las 19 naciones aliadas, quienes guardaron, junto a todo el personal de la Alianza, un minuto de silencio mientras se izaban a media asta las banderas de la OTAN y los Estados miembros y un capellán rezaba una plegaria.
Burns señaló que "al igual que afrontamos el desafío de responder al 11 de septiembre el pasado otoño, ahora debemos afrontar el futuro del mismo modo: unidos y resueltos para ganar la guerra contra el terrorismo y las armas de destrucción masiva".
El secretario general de la OTAN, George Robertson, destacó en la ceremonia que "también debemos estar preparados para afrontar la amenaza de las armas de destrucción masiva, que ofrecen a los terroristas y regímenes deshonestos la capacidad para sembrar incluso mayor horror entre nuestras gentes". "Hoy, en la OTAN reafirmamos nuestro compromiso de mantener la asociación transatlántica entre Europa y Norteamérica", apostilló.
Las palabras de Robertson fueron interpretadas por un portavoz aliado como que "la Alianza está lista para actuar contra cualquier amenaza si, llegado el caso, se lo pide el Consejo Atlántico". En su discurso, Burns admitió que los europeos y estadounidenses no siempre están de acuerdo, pero "debemos permanecer unidos en un punto esencial: no puede haber justificación para el terrorismo".
Burns recalcó también que tras lo ocurrido el 11 de septiembre de 2001, los aliados de la OTAN "no nos veremos amenazados por Estados hostiles, sino por Estados fracasados". "No nos veremos amenazados por grandes ejércitos aquí en Europa, sino por la mezcla tóxica de grupos terroristas y armas de destrucción masiva lejos de las fronteras de la OTAN", agregó.
El embajador se congratuló de la invocación por la Alianza Atlántica el 12 de septiembre de 2001, un día después de los atentados, "mientras todavía ardía el Pentágono", del Artículo V del Tratado de Washington de defensa mutua, con el que se envió el mensaje de que "los ataques fueron un ataque contra los diecinueve aliados".
En lo que puede interpretarse como una tácita llamada a los aliados para que sigan a Washington en caso de una acción militar contra Irak, el embajador de EU ante la OTAN, Nicholas Burns, aseguró ayer que su país no quiere adoptar medidas unilaterales, aunque en ningún momento mencionó al régimen de Bagdad.
"Pese a nuestro imponente poder, no podemos actuar solos en el mundo. Necesitamos a nuestros amigos y especialmente, a nuestros aliados de la OTAN. Ni aislamiento ni unilateralismo podrán ser nunca el camino estadounidense", subrayó Burns.
El embajador del principal país de la Alianza Atlántica se pronunció así durante una solemne ceremonia en la sede de la organización militar en memoria de las víctimas de los ataques del 11 de septiembre. Asistieron los embajadores de las 19 naciones aliadas, quienes guardaron, junto a todo el personal de la Alianza, un minuto de silencio mientras se izaban a media asta las banderas de la OTAN y los Estados miembros y un capellán rezaba una plegaria.
Burns señaló que "al igual que afrontamos el desafío de responder al 11 de septiembre el pasado otoño, ahora debemos afrontar el futuro del mismo modo: unidos y resueltos para ganar la guerra contra el terrorismo y las armas de destrucción masiva".
El secretario general de la OTAN, George Robertson, destacó en la ceremonia que "también debemos estar preparados para afrontar la amenaza de las armas de destrucción masiva, que ofrecen a los terroristas y regímenes deshonestos la capacidad para sembrar incluso mayor horror entre nuestras gentes". "Hoy, en la OTAN reafirmamos nuestro compromiso de mantener la asociación transatlántica entre Europa y Norteamérica", apostilló.
Las palabras de Robertson fueron interpretadas por un portavoz aliado como que "la Alianza está lista para actuar contra cualquier amenaza si, llegado el caso, se lo pide el Consejo Atlántico". En su discurso, Burns admitió que los europeos y estadounidenses no siempre están de acuerdo, pero "debemos permanecer unidos en un punto esencial: no puede haber justificación para el terrorismo".
Burns recalcó también que tras lo ocurrido el 11 de septiembre de 2001, los aliados de la OTAN "no nos veremos amenazados por Estados hostiles, sino por Estados fracasados". "No nos veremos amenazados por grandes ejércitos aquí en Europa, sino por la mezcla tóxica de grupos terroristas y armas de destrucción masiva lejos de las fronteras de la OTAN", agregó.
El embajador se congratuló de la invocación por la Alianza Atlántica el 12 de septiembre de 2001, un día después de los atentados, "mientras todavía ardía el Pentágono", del Artículo V del Tratado de Washington de defensa mutua, con el que se envió el mensaje de que "los ataques fueron un ataque contra los diecinueve aliados".
Para comentar debes registrarte y completar los datos generales.