Panamá
La lucha de pueblos indígenas en el marco del bicentenario
La lucha de los indígenas es milenaria, ubicarlos desde hace doscientos años como tema del bicentenario es desconocer una gran parte de las luchas indígenas, su verdadera historia, es ignorar muchos nombres que permanecen latentes, pero que no han sido reconocidos en su justa dimensión.
- Simón Herrera G.
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- - Publicado: 01/12/2021 - 12:00 am
Han transcurrido 200 años desde que Panamá se independizó de España cuando sus grandes personajes, que vislumbraron la necesidad de llevar a cabo las luchas, se revelaron en contra de la corona española para después pertenecer a la Gran Colombia.
En nuestro país Panamá, que prefiero aceptar el concepto de “Bannaba” como el origen de su nombre, viven siete grupos indígenas con sus propias costumbres y culturas. En el marco del bicentenario, destacamos solo algunos hechos históricos que se remontan hasta mucho antes de la llegada de Cristóbal Colón a Abya Yala (América). Fueron precisamente los indígenas quienes recibieron al genovés y sus marineros.
La lucha de los indígenas es milenaria, ubicarlos desde hace doscientos años como tema del bicentenario es desconocer una gran parte de las luchas indígenas, su verdadera historia, es ignorar muchos nombres que permanecen latentes, pero que no han sido reconocidos en su justa dimensión.
Personajes que se mantienen en el anonimato desde que el istmo de Panamá se separó de España hasta la histórica separación de Colombia en 1903.
Haciendo un inventario en relación con el tema del bicentenario salen a relucir los nombres de los prominentes personajes que nacieron a principios del siglo XIX como Kipan, Kupy, Tanela, Tinapilele, Palicua, Machigua, Guavia, Yaquiña-Nilele, Inanaginya, y otros.
En la década de 1870, Kupy y Tinapilele, solicitaron la presencia de los personajes del momento a una gran reunión, para enviar una delegación a Bogotá a solicitar al Gobierno de Eustorjio Salgar, el reconocimiento de las tierras donde estaban viviendo que se denominaría Tulenega y fue la primera comarca formalmente creada en 1871. Durante el viaje, que describió el diario Cundinamarca de Colombia en 1870, Yaquiña Nilele perdió la vida en Popayán.
Desde la creación de la comarca Tulenega, que formalmente fue en 1871, las tierras de puerto Escribano, en el distrito de Santa Isabel, provincia de Colón, que en guna se denomina Nurdargana, y otros terrenos, fueron expropiados por el Estado panameño cuando ocurrió la histórica separación en 1903, ya eran parte de tal comarca, por lo que actualmente las exigencias del pueblo guna son leales, justas y auténticas. Las tierras fueron heredadas a través de las gestiones de los grandes personajes gunas del momento.
Por eso, para mí, las actuaciones de Inanaginya en su momento fueron comprensibles cuando rechazó perder el estatus de la primera comarca a raíz de la separación definitiva de 1903.
Por otra parte, en 1887, en Acandi, un pueblo pequeño ubicado en el Golfo de Urabá, que albergaba los grupos indígenas como gunas y emberás, históricamente han sido desplazados y desposeídos de sus tierras por grupos de colonizadores con el deseo de apropiarse de sus bienes.
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En ese momento, hubo enfrentamientos entre los indígenas y los invasores de tierras quienes querían apropiarse de tagua. Amenazaron de muerte a sus residentes si no aceptaban sus peticiones.
Ahora que recreamos algunos hechos históricos de los pueblos indígenas, los mismos están llenos de capítulos de lucha, que deben ser conocidos como parte de la historia del país, ya que muchos de esos logros se mantienen en el anonimato.
Abya Yala ha servido de modelo para incentivar el respeto a los derechos, costumbres, cultura y la idiosincrasia de los pueblos indígenas. Después de mucho tiempo, los mismos pueblos se aferran a su cultura para mantener sus raíces intactas. Así tenemos la historia de los hermanos Ngäbe, Buglé, Naso Tjërdi, Bri-Bri, Emberá y Wounaan. La administración del Estado panameño, de parte de los gobernantes, debe ser en forma integral.
Como parte de esta celebración histórica, es importante observar que la Organización Internacional del Trabajo (OIT) ha analizado, en diferentes escenarios, y enfatizado sobre la importancia de reconocer los derechos de los pueblos indígenas y tribales en su justa dimensión, con sus propios territorios, valores espirituales, apreciar sus diversas manifestaciones, la diversidad de sus idiomas, libre de discriminación de toda índole.
Panamá es soberana e independiente. Su historia descansa, sin ninguna duda, en las buenas acciones de sus próceres, así como la historia ancestral de sus pueblos originarios que actualmente sus hijos siguen recordando sus luchas para seguir levantando la voz juntos, exigiendo los justos reconocimientos y respeto a sus tierras como parte de la nación panameña que ahora por los actos conmemorativos de una gran nación como Panamá, relucen con más brío.
Docente e investigador.
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