Infieles por emoción
Excusa o motivo, las mujeres adúlteras buscan sentirse más atractivas y queridas.
La hora del almuerzo, giras de trabajo y tiempo extra eran la excusa perfecta para que Lía y su amante disfrutaran de ardientes encuentros. Por varios meses, esta joven profesional, casada...
- Vircy Duarte T. ([email protected]) /@VircyMujer
- - Publicado: 04/3/2015 - 12:00 am
La hora del almuerzo, giras de trabajo y tiempo extra eran la excusa perfecta para que Lía y su amante disfrutaran de ardientes encuentros. Por varios meses, esta joven profesional, casada y madre de una niña regaló a su cuerpo aquellas emociones que pensó había perdido. “Le fui infiel a mi esposo porque quería sentir que era atractiva ante otros hombres, deseaba revivir esas emociones que ya no sentía”, expresó la guapa chica.
Por mucho tiempo, los que duró la infidelidad, Lía hizo prácticamente a un lado a su esposo, no quería nisiquiera que la tocara, ella disfrutaba más de la adrenalina que le generaba hacer algo indebido. Pero, un buen día “me di cuenta que estaba errada, de que esas emociones que buscaba las podía encontrar en mi pareja, solo tenía que pedirlo”.
Al igual que Lía, muchas mujeres están en esta misma situación, y es que aunque por años se ha creído que ellos son quienes más engañan a su pareja recientes estudios revelan que es todo lo contrario. El Centro de Reproducción Humana del Instituto Conmemorativo Gorgas con el apoyo del Fondo de la Población de las Naciones Unidas e instituciones estatales reveló, a través de una investigación, que el 48.9% de las panameñas casadas o que viven en pareja han tenido “dos o más compañeros sexuales en los últimos años” frente al 46.4% de los hombres que fueron infieles en ese mismo periodo.
Las estadísticas demuestran que cada vez son más las mujeres infieles, echando por tierra eso de que la infidelidad es un tema exclusivo de hombres. “Todo se debe a que el hombre antes era el proveedor en la casa, ahora es distinto. La mujer se ha preocupado por estudiar, por prepararse, por aportar en el hogar y esto le da como una cierta libertad”, explicó la sexóloga Yunilca Brett.
Además, agregó que cuando un hombre es infiel lo hace por sexo, mientras que en el caso de las féminas es por emoción, “la mujer elige a su presa, no es a con cualquiera”, dijo Brett.
La experta aclaró que la mujer siempre ha sido infiel, solo que sí sabe hacer las cosas, es decir no alardea de lo que hace, prefiere mantenerlo todo oculto. “En este aspecto lo que más bien ha cambiado es el panorama, antes las mujeres engañaban a sus esposos con el vecino, el compadre o con un amigo debido a que no trabajaba y siempre estaba en casa. Actualmente es infiel con compañeros de trabajo o estudio o con clientes”, aseguró Yunilca Brett.
Todo va en la crianza
En los códigos sociales varón con más de una mujer es recibido o visto con complicidad por los otros varones y hasta por su familia, rara es la vez en que la sociedad va a reprobar duramente una infidelidad masculina. Pero en el caso de la mujer resulta todo lo contrario, la juzgan y critican duramente, “aquí se ve claramente que esto sucede por la crianza y quien tiene la culpa, la misma mujer. A el hombre desde niño se le enseña que puede tener novia, se le forma como todo un machista”, mencionó la sexóloga. Busca más sobre este tema, mañana, en Revista Mujer.
¿Se debe perdonar una infidelidad?
Perdonar una infidelidad es un tema muy personal, cada persona decide que es lo correcto para ella y su vida. Sin embargo, la sexóloga Yunilca Brett dice que todo el mundo tiene derecho a equivocarse y a ser perdonado, “si el arrepentimiento es de verdad y se hace de corazón creo que se debe perdonar”, dijo.
Diversos especialistas coinciden en que perdonar supone hacerlo en el sentido estricto de la palabra, es decir, haciendo de verdad borrón y cuenta nueva. Nadie puede decir que perdona una infidelidad si a partir de ese momento va a estar controlando a su pareja en cada paso que dé.
También aconsejan que lo que nunca se debe hacer ante una infidelidad es pagar al otro con la misma moneda, aquello de “ojo por ojo, diente por diente” no funciona. Es importante que cada persona se valore a sí misma. Por otra parte, tampoco se debe actuar como si no hubiese pasado nada, ignorando la situación porque, cuando se reprimen las emociones, en algún momento explotan y esto resulta mucho peor.
Signos que la delatan
Aunque ellas saben hacer muy bien su trabajo, sí hay señales que podrían dejarlas al descubierto, toma nota:
1. Sus amigas se vuelven cómplices, las veras conversando más.
2. Nada de lo que hacen sus esposos las llenan.
3. Tienen gastos excesivos e injustificables.
4. Sale más frecuentemente (con sus amigas o pone la excusa de ir de compras).
5. Pérdida del apetito sexual, incluso rechazo.
6. No le molesta que su pareja salga con sus amigos o con otras personas.
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