Agua potable de Bocas del Toro y Chiriquí no representa riesgo
Las autoridades del Minsa, la Anam y el Instituto de Acueductos y Alcantarillados Nacionales (Idaan), en Chiriquí, Veraguas y Bocas del Toro, certifican que el agua que sale del grifo no registra peligro para el consumo humano.
Agua potable de Bocas del Toro y Chiriquí no representa riesgo
Las autoridades del Minsa, la Anam y el Instituto de Acueductos y Alcantarillados Nacionales (Idaan), en Chiriquí, Veraguas y Bocas del Toro, certifican que el agua que sale del grifo no registra peligro para el consumo humano.
Las 13 plantas potabilizadoras, 42 pozos y los 580 acueductos rurales de Chiriquí están libres de contaminación.
Las autoridades sustentan esto en los análisis semanales que realizan biólogos y químicos.
El gerente regional del Idaan en la provincia de Chiriquí, Rodrigo González, aseguró que se mantiene un control permanente del agua, mediante un laboratorio recién inaugurado.
Mientras, Cristopher González, administrador encargado de la Anam en Chiriquí, afirmó que realizan dos veces al año un monitoreo de contaminación de agua a todos los afluentes de la provincia.
Por otra parte, el director provincial del Idaan en Bocas del Toro, Reynaldo Esquivel, dijo que en los ríos que abastecen de agua cruda a las potabilizadoras de Changuinola, Almirante, Guabito e Isla Colón, no hay ningún tipo de industria que pudiera provocar alguna contaminación.
Agregó que por normas de seguridad y para tranquilidad de los usuarios y el Gobierno, se mantiene un estricto monitoreo dos veces al día. Para este propósito se construyó un laboratorio con su químico, enfatizó.
En Colón, la Anam y el Idaan mantienen constantes monitoreos por los focos de contaminación ubicados en el río Chagres, que abastece de agua cruda a varias potabilizadoras.
La directora del Parque Nacional Chagres, Soledad Batista, indicó que la Anam le informó sobre la llegada de gran cantidad de turistas y nacionales a varios puntos del río, lo que provoca contaminación.
Añadió que hay actividades espontáneas en los ríos Boquerón Arriba y Boquerón Abajo, que desde 1990 producen el incremento de los desechos.
Con el fin de contrarrestar esta contaminación, se conformaron varios grupos para el manejo de la basura. Además, se decidió cobrar la entrada a estos afluentes para garantizar los fondos para su limpieza y el control del ingreso de personas.