Mariano Rivera da la cara

Reza el dicho que la procesión se lleva por dentro y a juzgar por el manejo de Mariano Rivera, el mejor cerrador de todos los tiempos, así trata de conducir el escándalo mediático y público en el que se ha visto envuelto en los últimos días por la situación legal con dos de sus cinco hijos.

Ayer, el primer pelotero en ser elegido por unanimidad al Salón de la Fama ofreció una conferencia de prensa para referirse al asunto y solicitar privacidad en el tema.

Rivera hizo su aparición tomado del brazo de su esposa Clara y en compañía de sus cuñadas. Luego saludó, uno a uno, a cada miembro de la prensa.

Entonces, tomó asiento, dio las gracias a Dios y procedió a disculparse por los errores cometidos.

"Quiero tomar este tiempo para disculparme por el mal testimonio que en un tiempo di, pero le doy gracias a Dios que por su misericordia en medio de mis debilidades me guardó, perdonó y hoy estoy aquí, de pie", comentó Rivera.

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Hay que recordar que el "Expreso de Puerto Caimito" enfrenta una demanda por el supuesto delito contra el orden jurídico, familiar y el estado civil, en perjuicio de dos hijos menores de edad, que residen en Panamá.

En este sentido, Rivera admitió que existen las demandas, sin embargo, aseguró que las mismas no tienen fundamento y están afectando a sus hijos, a quienes "quiere y ama con el corazón".

Mientras Maity Álvarez, del equipo legal de "Mo", condenó los señalamientos de la abogada de la parte acusadora, los que calificó de "injuriosos, irrespetuosos y antiéticos". Aclaró, además, que no emitirán más comentarios sobre las incidencias y estrategias de la defensa.

Por otro lado, Mariano descartó que esta circunstancia afecte su presencia en la ceremonia de exaltación al templo de los inmortales, el 21 de julio.

"No tiene que ver en lo absoluto. Es más, invito a todo el pueblo panameño para que asista", añadió.

En relación con la coincidencia de que el asunto estallara cuando recibió su cupo a Cooperstown, el excerrador dijo que "hay gente que se destina a hacer maldades, pero que Dios tiene el control".