Presidente de club que sostuvo romance con un futbolista termina tras las rejas
El directivo era toda una ficha y ahora está acusado de trata y explotación sexual.
El directivo acosaba al jugador.
Hace un par de semanas, la noticia del romance entre un jugador y el presidente de su club le dio la vuelta al mundo, tras polémicas y episodios de celos.Pero la novela no acabaría allí, porque recién esta semana sumó un nuevo capítulo. Resulta que Antonio González, el directivo citado, terminó tras las rejas.Según explica Infobae, el gerenciador del Rubio Ñu de Luque estaba prófugo de la justicia desde el pasado 13 de febrero. El Ministerio Público lo había imputado entonces por trata de personas con fines de explotación sexual y laboral luego de que dos futbolistas lo denunciaran por acoso.González debe esperar, por lo menos cinco días, para saber si sigue detenido o podrá obtener libertad. El señalado justificó su reporte tardío ante las autoridades competentes.
VEA TAMBIÉN: Romance entre jugador y presidente de club paraguayo termina en guerraVEA TAMBIÉN: Sufrida victoria llevó directo a la tumba a un joven boxeador "Mi notificación llegó para el 22 de febrero y después se suspendió porque el juzgado estaba de turno, se pasó para el día siguiente y el 23 me presenté".González ofreció sus disculpas, pero dijo que todo se aclarará."Le pido disculpas a los padres de los chicos si es que cometí algún error en un cierto momento. Tenemos unos 6 meses de investigación por delante y seguro todo se va a aclarar", manifestó.Con relación a los "afectados", Antonio no quiso pronunciar palabras."De eso ya no quiero hablar", afirmó.Hay que recordar que la polémica comenzó cuando el directivo acusó al jugador Bernardo Gabriel Caballero de traición. Ambos mantuvieron una relación sentimental. Pero tras la filtración de una foto íntima de ellos, la situación se agravó. Y sumó más problemas debido a que Caballero tiene otra pareja, Valentín Ozuna.Ozuna rompió el silencio y explicó que en realidad el gerenciador era un hombre de mucho poder y dinero que obligaba a los jugadores a mantener relaciones sexuales con él.Además, en diálogo con Infobae de Argentina contó que él no es el agente del futbolista, sino solo su pareja.