¿Eres bebedora moderada o habitual?

A lo largo del tiempo la sociedad nos ha incrustado el chip de que beber cerveza es "cosa de hombres", pero lo cierto es que gracias a las luchas feministas esta mentalidad ha ido cambiando y más mujeres se atreven a probar esta bebida.

La pregunta de muchas es ¿cómo afecta esto al cuerpo? Empecemos con lo negativo. Un estudio realizado durante nueve años en más de 250.000 personas de diferentes países europeos entrega datos concluyentes que permiten afirmar que el consumo de alcohol a lo largo de la vida produce la acumulación de grasa abdominal y, como consecuencia, un aumento del perímetro de la cintura y del índice de masa corporal (IMC).

Sin embargo, los bebedores moderados tienen menos posibilidades de tener sobrepeso o ser obesos, mientras que los consumidores habituales tienen una mayor tendencia a engordar. Esto lo afirmó otro estudio realizado por la Clínica Mayo de Rochester (Estados Unidos), en el que el análisis de más 8.000 personas estableció la frontera que define el aumento drástico del peso corporal en el equivalente a superar el consumo de cinco copas estándares semanales (5 copas de vino de 120 ml c/u o 5 tragos de destilados de 50 ml c/u o 5 cervezas de 355 ml c/u).

'Tips'

La nutrióloga mexicana, Daniela, nos brinda algunos consejos para tomar en cuenta a la hora de beber licor:

Bebe abundante agua

El alcohol te deshidrata y eso provoca todas las molestias que llegan al día siguiente. Además, bebiendo agua amortiguarás el trabajo al que estás sometiendo tu hígado.

Elige los días que vas a beber

Evita que sean momentos espontáneos, porque de esta manera te servirá para controlar tu consumo de alcohol semanal.

Al preparar bebidas

Prepara tus bebidas con agua mineral (agua gasificada), endulzantes sin calorías, limón, menta, algunas frutas frescas para dar sabor.