Trump recibe a Santos para hablar sobre drogas y de Venezuela
Trump dijo que los equipos de ambos países están 'trabajando muy bien y muy diligentemente', y que él pasaría 'mucho tiempo' con el presidente Juan Manuel Santos 'en el futuro'.
Estiman en 188 mil las hectáreas sembradas con coca. /Foto EFE
El presidente de EE.UU., Donald Trump, recibió en la Casa Blanca a su homólogo colombiano, Juan Manuel Santos, y dijo que hablaría con él sobre la producción y el tráfico de drogas, que calificó como "un problema muy grande", y sobre la situación "muy triste" que se vive actualmente en Venezuela.
"Es un gran honor tener aquí al presidente Juan Manuel Santos, de Colombia. Vamos a tener largas conversaciones. Colombia ha estado haciendo grandes avances, pero estamos trabajando para acabar con las drogas porque tenemos un problema con las drogas, un gran problema con las drogas", dijo el presidente Donald Trump al inicio de su reunión con Santos en el Despacho Oval de la Casa Blanca.
Trump dijo que los equipos de ambos países están "trabajando muy bien y muy diligentemente", y que él pasaría "mucho tiempo" (ayer) con el presidente Juan Manuel Santos y esperaba pasar aún más "en el futuro".
"Vamos a hablar (también) sobre Venezuela. Lo que está pasando en Venezuela es muy, muy triste", aseguró el presidente Trump en respuesta a la pregunta de una periodista sobre el tema.
El presidente Juan Manuel Santos no hizo ninguna declaración ante la prensa al comienzo del encuentro, el primero que mantiene con el presidente Donald Trump y en el que esperaba hablar con él sobre la implementación del acuerdo de paz colombiano y la relación de comercio bilateral.
Aunque Trump no especificó qué aspecto del "problema de las drogas" es el que más le preocupa, el Gobierno estadounidense ha expresado varias veces su inquietud por el aumento de los cultivos ilícitos de coca en el país andino.
Según una estimación de la Casa Blanca, la producción potencial de cocaína pura en Colombia alcanzó en 2016 un nivel récord al aumentar un 37%, hasta las 710 toneladas métricas, mientras que el cultivo de la droga aumentó un 18%, con 188 mil hectáreas sembradas con coca.