Iván Zamorano, goleador que se repuso a las adversidades

Iván Zamorano. Desde muy pequeño ya mostraba sus condiciones futbolísticas, mientras se desempeñaba en las inferiores de la filial de su club, Cobresal, en Maipú. En rigor, su primer club fue el Cultura Villa México, en una Liga Independiente de esa comuna. Zamorano entonces tenía 6 años.
El mito dice que Bam-Bam fue rechazado cuando fue a probarse a la escuela de Colo Colo, porque al parecer "era demasiado delgado". Pero eso no distrajo a Iván y aceptó seguir su carrera en Cobresal, después de un exitoso paso en el Benito Juárez, otro club infantil en el que jugó.
El entonces entrenador de las inferiores de Cobresal, el argentino Juan Zárate, lo envió a El Salvador a integrarse al plantel oficial del equipo, cuando apenas rondaba los 17 años. En 1988 llegó la oferta del Bologna de Italia para llevarlo a Europa y Zamorano aceptó sin pensarlo dos veces. Pero las cosas no se dieron bien, y el chileno terminó jugando en el Saint Gällen.
En el fútbol suizo siguió subiendo su nivel y su cuota de goles se mantenía muy elevada. Tres temporadas y el Sevilla lo contrató en 5 millones de dólares. El Sevilla era dirigido por Vicente Cantantore, quien vio en Zamorano a un potencial astro. Dos años marcando goles en el Sevilla y el Real Madrid lo contrató en 6 millones de dólares, siendo el jugador chileno más caro de la historia hasta ese momento. En Madrid logró títulos y fue goleador de la Liga, anotando más de 100 goles.Zamorano viajó a Italia para enrolarse en el Inter de Milán, donde también ha cosechado títulos bajo el mando de Luigi Simoni.
En la Selección Nacional el goleador debutó el 19 de junio de 1987 en un amistoso ante Perú. Desde entonces ha jugado un Mundial (Francia "98), tres Copa América (Argentina "87, Chile "91 y Ecuador "93) y dos eliminatorias.