Reestructuración del Estado
Reestructuración del Estado
En nuestro país, Panamá se procura realizar una Constituyente para "actualizar el Estado", tarea nada fácil si reconocemos la realidad existencial nacional, como la internacional. Y en esa perspectiva, hay que aceptar que el Liberalismo en América Latina, se interpreta mayoritariamente sobre una consideración económica que lo promueve únicamente en cuanto a la defensa de la Economía de Mercado, la Propiedad Privada, y el Libre Fomento de las Inversiones Nacionales y Extranjeras.
De allí, la primera inquietud, ya que para desarrollar el proyecto, que sirve de título al presente artículo, debe considerarse integrar sin duda alguna, las libertades políticas, respeto a la Carta Magna, y a las Leyes, la vigencia contundente y oportuna del Estado Democrático y desde luego; el cumplimiento real y efectivo de los Derechos Humanos.
Y es que la reestructuración de un Estado, exige la plena conciencia que la población en general debe participar, desde luego con ideas expresadas en libertad, (aún sean distintas) y con pleno derecho de coexistencia. A saber, aquí no cabe el pensamiento único, exclusivo e intrínsecamente verdadero. Es por ello que el ambiente socio-político debe ser un requisito sine qua non.
Y claro, otra pregunta, quiénes participarán en ese intento, ya que para nadie es un secreto que hoy por hoy, hay grupos que de por sí están excluídos de un proyecto que requiere su presencia y participación, los mismos Partidos Políticos se encuentran tratando de resolver crisis internas que les propina una calificación muy modesta, que les resta legitimidad, en situación difícil se encuentran Gremios, Organizaciones Estudiantiles, por ello resulta ineludible saber quiénes serían los interlocutores de tan enorme tarea.
Y siguiendo las inquietudes, cuáles serían las innovaciones, por presentar. No hace mucho, vimos que no se pudo llegar a concertar entre los Trabajadores y la Patronal un Salario Mínimo, lo que nos permite identificar la dificultad de llegar a acuerdos en temas únicos que conllevan bastantes consideraciones. En ese sentido, ya contamos con una explicación, que en el año 1,776 Adam Smith, en su libro "La Riqueza de la Naciones" afirmó: "La iniciativa privada nace a partir del egoísmo y no del altruismo".
Reflexión que permite adelantar realidades que deben ser tomadas en cuenta, cuando se toque el tema económico en una Constituyente. Por lo que dicho debate no puede ser huérfano de las creencias políticas de quienes intervengan; para lograr un relativo equilibrio.
Igualmente, la materia pendiente por hace más de 40 años: La Educación, a lo que Adam Smith también nos dejó un mensaje, ya que consideraba la educación indispensable para una cabal competencia y el Estado debía sufragarla si el individuo no puede. En el contexto de los temas a tratar, hay muchos la salud, el trabajo, aumento de la delincuencia, el agua, régimen ecológico, segunda vuelta electoral, Tribunal Constitucional, entre otros.
Pero para iniciar los preparativos debemos recordar a Karl Popper y su libro “La Sociedad Abierta y sus Enemigos”, en donde nos indica que no se puede reducir el Liberalismo a una receta económica de mercados libres, aranceles bajos, gastos públicos controlados y privatización de las Empresas”.