Puerto Rico prolonga su fiesta de melenas rubias en el Clásico Mundial
Los puertorriqueños vencieron el viernes 6-5 a Estados Unidos y avanzaron a las semifinales de este torneo. Ahora tendrán que medirse a Holanda por el pase a la final.
Puerto Rico tiene un juego pendiente en su grupo.
La fiesta de las cabelleras rubias de Puerto Rico continuará hasta la última ronda del Clásico Mundial de Béisbol.
Puerto Rico abrió el partido con cuatro carreras y seis hits consecutivos, y después aguantó una remontada tardía de Estados Unidos, para imponerse el viernes por 6-5 y avanzar a las semifinales del Clásico.
Con un partido pendiente, los boricuas aseguraron el primer puesto del Grupo F, y enfrentarán el lunes a Holanda en el Dodger Stadium por el boleto a su segunda final consecutiva. Hace cuatro años, perdieron ante República Dominicana en el partido por la corona.
"Estamos contentos por el trabajo que todos han hecho", dijo el bateador designado Carlos Beltrán, uno de los veteranos de un plantel con jóvenes figuras de las Grandes Ligas como Carlos Correa, Francisco Lindor y Javier Báez. "Creo que a los muchachos han hecho un buen trabajo jugando por su país. Estoy contento por nuestro país y por nuestra gente. Están muy orgullosos de nosotros, y espero que podamos terminar nuestra misión".
Exuberantes en sus festejos y con las cabelleras y barbas teñidas de rubio, los jugadores de la selección puertorriqueña están invictos en sus seis encuentros hasta ahora.
La otra plaza para semifinales del Grupo F será para el ganador del juego de hoy entre Estados Unidos (1-1) y República Dominicana (1-1). El vencedor jugará el martes contra Japón. El resultado también eliminó a Venezuela (0-2), rival de Puerto Rico el sábado por la tarde.