Lamentan que Argentina no expulse a Oviedo
Publicado 1999/10/05 23:00:00
- Hungaroring
Félix Argaña, hijo del asesinado vicepresidente de Paraguay Luis María Argaña, lamentó que Argentina haya decidido no expulsar a Lino Oviedo luego de que el ex general realizara nuevas declaraciones "de tinte político". Asimismo, manifestó su esperanza de que el Gobierno que surja de las elecciones presidenciales argentinas del próximo 24 de octubre, "rectifique" las decisiones tomadas hasta el momento por la administración de Carlos Menem.
"Lamento la interpretación del Gobierno argentino pero no quiero tirar más leûa al fuego ya que las relaciones se encuentran muy deterioradas", expresó en rueda de prensa Argaña, actual concejal por la ciudad de Asunción.
El político, que se postula para el cargo que ocupaba su padre -asesinado por sicarios el 23 de marzo- con miras a las elecciones programadas para agosto del 2000, dijo que sentía mucho que Menem interpretara que Oviedo no realizó declaraciones políticas.
Agregó que tenía esperanzas en que el próximo Gobierno argentino que sustituirá a la Administración Menem rectificará las decisiones que se tomaron hasta ahora.
Por otro lado el canciller argentino Guido Di Tella afirmó ayer que preferiríamos no tener (al asilado ex general paraguayo Lino) Oviedo en Argentina e incluso que desapareciera en el aire, aunque admitió que seguirá permaneciendo en este país.
Di Tella formuló declaraciones en el Congreso de la Nación, al cierre de unas jornadas del Grupo parlamentario de Amistad Hispano-Argentino.
El canciller aclaró sin embargo que Argentina honra la institución del asilo y que la aplica sin importar la persona de quien se trate.
El funcionario se mostró disgustado por la reiteración de declaraciones a la prensa de corte político realizadas por Oviedo, que fue trasladado a una estancia de Tierra del Fuego (3.100km al sur de Buenos Aires) en represalia por esta actitud.
Quisiera no tenerlo, que desaparezca en el aire, pero no es fácil. Es un garrón (fardo) que nos comimos y que nos estamos comiendo y no es sencillo, señaló a los periodistas en un lenguaje extremadamente coloquial alejado del formal estilo diplomático.
Di Tella aseguró que el tema Oviedo es muy serio y ya le hemos hecho una última advertencia" para que evite los pronunciamientos de corte político que le están vedados por su condición de asilado, pero insistió en que "esta reiteración de advertencias nos está cansando a todos.
No obstante, el funcionario descartó que Argentina esté buscando otro país para el asilado, ya que "el que debe pedir asilo es Oviedo, no nosotros. Es él, el que lo tiene que conseguir".
"Lamento la interpretación del Gobierno argentino pero no quiero tirar más leûa al fuego ya que las relaciones se encuentran muy deterioradas", expresó en rueda de prensa Argaña, actual concejal por la ciudad de Asunción.
El político, que se postula para el cargo que ocupaba su padre -asesinado por sicarios el 23 de marzo- con miras a las elecciones programadas para agosto del 2000, dijo que sentía mucho que Menem interpretara que Oviedo no realizó declaraciones políticas.
Agregó que tenía esperanzas en que el próximo Gobierno argentino que sustituirá a la Administración Menem rectificará las decisiones que se tomaron hasta ahora.
Por otro lado el canciller argentino Guido Di Tella afirmó ayer que preferiríamos no tener (al asilado ex general paraguayo Lino) Oviedo en Argentina e incluso que desapareciera en el aire, aunque admitió que seguirá permaneciendo en este país.
Di Tella formuló declaraciones en el Congreso de la Nación, al cierre de unas jornadas del Grupo parlamentario de Amistad Hispano-Argentino.
El canciller aclaró sin embargo que Argentina honra la institución del asilo y que la aplica sin importar la persona de quien se trate.
El funcionario se mostró disgustado por la reiteración de declaraciones a la prensa de corte político realizadas por Oviedo, que fue trasladado a una estancia de Tierra del Fuego (3.100km al sur de Buenos Aires) en represalia por esta actitud.
Quisiera no tenerlo, que desaparezca en el aire, pero no es fácil. Es un garrón (fardo) que nos comimos y que nos estamos comiendo y no es sencillo, señaló a los periodistas en un lenguaje extremadamente coloquial alejado del formal estilo diplomático.
Di Tella aseguró que el tema Oviedo es muy serio y ya le hemos hecho una última advertencia" para que evite los pronunciamientos de corte político que le están vedados por su condición de asilado, pero insistió en que "esta reiteración de advertencias nos está cansando a todos.
No obstante, el funcionario descartó que Argentina esté buscando otro país para el asilado, ya que "el que debe pedir asilo es Oviedo, no nosotros. Es él, el que lo tiene que conseguir".
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