Spurs a un triunfo de barrer a Mavericks

La defensa y la consistencia en el ataque de las "Torres Gemelas" permitieron a los Spurs de San Antonio vencer por 104-90 a los Mavericks de Dallas en el tercer partido de la eliminatoria semifinal de la Federación Oeste que dominan por 3-0.

El cambio de escenario, el Alamodome de San Antonio por el Reunion Arena de Dallas, no significó ninguna variación en el juego en la llamada "Batalla Texana", que los Spurs volvió a dominar de principio a fin tanto en ataque como en defensa.

El veterano pívot David Robinson mostró más solidez que nunca en su trabajo defensivo y de nuevo volvió a ser la pesadilla para el celebrado ataque de los Mavericks, que volvió a fallar ante la presión del equipo de la ciudad del Alamo.

Especialmente el alero Juwan Howard, el jugador que lesionó de gravedad al escolta Derek Anderson en el primer partido, que no ha podido superar la agresividad con que le han marcado Robinson y el alero Tim Duncan.

Los dos grandes protagonistas del partido junto con el veterano Sean Elliott, que realizó su mejor partido de la fase final al conseguir 17 puntos, 10 de ellos en el cuarto periodo.

El cuarto partido se disputará el próximo sábado y los Spurs, que nunca han perdido una serie de siete partidos cuando han conseguido la ventaja de 3-0, podrían convertirse en el primer equipo en pasar a la final de la Federación Oeste para esperar a su rival que saldrá de la eliminatoria que juegan Los Angeles Lakers y los Kings de Sacramento (2-0).

SIXERS 97, RAPTORS 92El escolta Allen Iverson surgió en el momento decisivo para reivindicar su condición de estrella indiscutibles de los Sixers de Philadelphia, que se apoyaron en su ataque explosivo para vencer por 97-92 a los Raptors de Toronto en el segundo partido de las semifinales de la Federación Este que lograron empatar a 1-1.

Iverson, que en el primer partido no pudo salvar a los Sixers del mejor juego de conjunto de los Raptors y de su estrella Vince Carter, esta vez se erigió en figura y héroe de los Sixers al aportarles 54 puntos, su mejor marca como profesional en la fase final y la mejor anotación en lo que va de competición dentro de la NBA.

El trabajo individual de Iverson, que anotó 21 canastas de 39 tiros de campo, incluidos tres triples de cinco intentos, y 9 de 9 desde la línea de personal, fue el que hizo posible el triunfo de los Sixers, que al finalizar el primer cuarto se habían colocado con un parcial de 21-31, 10 puntos abajo de diferencia después que el alero Vince Carter lograra 10 puntos para los Raptors.

Pero ahí se acabó el protagonismo de Carter porque Iverson comenzó a dirigir todas las acciones de los Sixers, que además le daban los balones para que fuese la primera y la única opción del de su ataque.

"Iverson ha jugado un partido excepcional y sin su actuación en estos momentos estaríamos 0-2 abajo en la eliminatoria", admitió Larry Brown, entrenador de los Sixers.

"Todo el equipo luchó al máximo y también hicimos una excelente defensa en los momentos decisivos de la segunda parte, pero cuando un jugador anota 54 puntos de 97 no hay ninguna duda que es la gran estrella".

Iversón también aportó cinco rebotes, cuatro asistencias y un robo de balón, mientras que el base Eric Snow aportó 10 puntos con 5 asistencias y el pívot Dikembe Mutombo anotó nueve tantos y capturó nueve balones bajo los aros, sin que fuese en ningún momento un factor en la victoria de su equipo.

"Sabía que tenía que jugar al máximo de mis posibilidades si queríamos ganar a los Raptors, que en el primer cuarto volvieron a demostrar que son un equipo muy difícil de superar", declaró Iverson.

"El triunfo era vital para nosotros porque no es lo mismo ir con la eliminatoria empatada a 1-1 que con 0-2 abajo".

Los Sixers como equipo volvieron a demostrar que no jugaron su mejor baloncesto y terminaron el partido con un 43,0 por ciento de acierto en los tiros de campo; 96,2 desde la línea de personal y el 57,1 en los triples (4 de 7 intentos), tres fueron de Iverson.

El acierto en los tiros de personales 25 de los 26 tiros que hicieron fue el factor que al final también inclinó la balanza del lado de los Sixers, mientras que los Raptors sólo encestaron 7 de 13 para un 53,8 por ciento de acierto.

El entrenador de los Raptors, Lenny Wilkens, se mostró furioso al terminar el partido por la actitud de los árbitros y dijo que las estadísticas reflejaban lo ridículo de la manera como habían dirigido el partido.

"No se puede comprender como a nosotros nos pitaron el doble de personales que a los Sixers cuando ellos son los que tienen la defensa más sólida", declaró Wilkens.

Carter, la estrella de los Raptors, esta vez no pudo con el protagonismo y el acierto de Iverson y se tuvo que conformar con ser el mejor de su equipo al conseguir 28 puntos (12 de 26 tiros de campo), siete rebotes y cuatro asistencias.

El pívot Antonio Davis lo apoyó con 19 puntos, 10 rebotes y tres asistencias, mientras que Alvin Williams aportó 15 tantos, cinco rebotes y ocho asistencias.

"Creo que jugamos un buen partido como equipo y merecimos tanto o más que los Sixers la victoria, pero algunos factores en los que no tuvimos control y eso nos costó el partido", comentó Carter.

"El objetivo está conseguido porque logramos el triunfo que nos permite la ventaja de campo y ahora debemos completar el trabajo en Toronto".

La derrota dejó a los Raptors con una marca de 3-2 fuera de su campo en lo que va la fase final después de haber ganado dos partidos en el Madison Square Garden de New York en la primera ronda y el primero de las semifinales ante los Sixers.

El tercer partido de la serie, que se disputa al mejor de siete, se jugará el próximo viernes en Toronto.