En seis países tocan el euro por primera vez
Publicado 2001/12/16 00:00:00
- Redacción Central
Los ciudadanos de seis países europeos tocaron ayer el euro por primera vez y comprobaron cómo es el peso, el color y el tacto de las que serán sus monedas a partir del próximo 1 de enero. En Bélgica, Italia, España, Luxemburgo, Austria y Finlandia, la calderilla del euro llegó al bolsillo de los ciudadanos, aunque no podrá ser utilizada hasta el próximo 1 de enero, cuando circulen los billetes y el euro sea ya la moneda de uso cotidiano.
Como dijo en Austria una señora de avanzada edad tras abrir su primer euromonedero, "simplemente quería tocarlo, tenerlo entre las manos", reflejando así el espíritu que experimentó la mayoría de los europeos en su primer contacto físico con las monedas.
También los líderes de la Unión Europea (UE) comenzaron ayer a acostumbrarse a las monedas de euro: a su llegada al castillo de Laeken, donde celebran su cumbre, recibieron un euromonedero.
Los líderes de la UE examinaron minuciosamente las bolsitas que contienen los euros, mientras charlaban de forma distendida y bromeaban sobre ellos, aunque según las imágenes ofrecidas por el canal interno de televisión parece que ninguno se animó a abrirlas.
Según una declaración del Consejo Europeo, la circulación del euro contribuirá "a unir a los ciudadanos de la Unión Europea y a dar una expresión concreta y visible al proyecto europeo".
El viernes pasado, fueron Holanda y Francia quienes iniciaron la venta de los llamados "euromonederos", mientras que Portugal, Alemania, Grecia e Irlanda lo harán mañana.
En España, las entidades financieras que abrieron ayer sus puertas se convirtieron en una parada obligada para los ciudadanos, que desafiaron la ola de frío reinante para salir a comprar sus primeros euromonederos a un precio de 2,000 pesetas (12,01 euros).
Aunque en pocos casos se llegaron a producir grandes colas ante las ventanillas, sí hubo fue una mayor afluencia de público que en un sábado normal, entre el que estuvo el secretario de Estado de Economía, José Folgado, que fue a una sucursal bancaria para comprar un euromonedero.
En España se produjeron en total 24 millones de euromonederos, con un valor facial de 288,5 millones de euros, lo que representa 1,032 millones de monedas con un peso aproximado de 10 toneladas.
Los euromonederos que se vendieron ayer en Austria se agotaron antes del mediodía en numerosas oficinas postales y bancos de guardia, así como en gasolineras de la compañía nacional OMV.
Los austríacos reaccionaron con entusiasmo ante el inicio del cambio de la calderilla de la futura moneda única europea, para lo que el Banco Nacional de Austria preparó 6 millones de euromonederos de 14.54 euros (200 chelines).
Con expresiones como "parece esto un asalto", "vaya horror" y "resulta increíble", los empleados de las oficinas postales y bancos de guardia describieron las primeras horas de venta.
Los primeros propietarios de la calderilla del euro coincidieron en destacar lo pequeñas y ligeras que son las nuevas monedas, su sorpresa por la combinación de colores en el metal y su agrado por el diseño elegido.
Desafiando a la lluvia y el frío, en Italia hubo largas colas frente a las oficinas postales -las entidades bancarias lo harán el lunes- para hacerse con los primeros euromonederos, un paquete de 53 monedas con un valor de 12.91 euros.
La mayoría de los ciudadanos que esperaban turno eran personas mayores, muchas de las cuales expresaron su interés en tocar cuanto antes la nueva moneda y prevenir así posibles futuros engaños.
Los belgas también pudieron comprar desde los primeros euromonederos por 500 francos belgas (12.40 euros) en las oficinas de correos y las ventanillas del metro de Bruselas y de la compañía ferroviaria, ya que los bancos no abrirán hasta el lunes.
Las empresas que quieran hacer un regalo estas Navidades a sus trabajadores podrán optar por entregarles un euromonedero, ya que obtendrán por ello exoneraciones fiscales.
En Finlandia, la distribución de euromonederos despertó gran interés, hasta el punto de formarse largas colas en los centros de venta. Cada uno de los 500,000 paquetes puestos a la venta tiene un precio de 23 marcos finlandeses (3.88 euros).
Las monedas de euro tienen un anverso común para todos los países de la unión monetaria y un reverso diferente para cada uno de ellos en el que se hace referencia a símbolos nacionales. No obstante, el hecho de que todas ellas sean válidas en los doce países de la unión monetaria hará que en poco tiempo estén repartidas por la zona euro.
Como dijo en Austria una señora de avanzada edad tras abrir su primer euromonedero, "simplemente quería tocarlo, tenerlo entre las manos", reflejando así el espíritu que experimentó la mayoría de los europeos en su primer contacto físico con las monedas.
También los líderes de la Unión Europea (UE) comenzaron ayer a acostumbrarse a las monedas de euro: a su llegada al castillo de Laeken, donde celebran su cumbre, recibieron un euromonedero.
Los líderes de la UE examinaron minuciosamente las bolsitas que contienen los euros, mientras charlaban de forma distendida y bromeaban sobre ellos, aunque según las imágenes ofrecidas por el canal interno de televisión parece que ninguno se animó a abrirlas.
Según una declaración del Consejo Europeo, la circulación del euro contribuirá "a unir a los ciudadanos de la Unión Europea y a dar una expresión concreta y visible al proyecto europeo".
El viernes pasado, fueron Holanda y Francia quienes iniciaron la venta de los llamados "euromonederos", mientras que Portugal, Alemania, Grecia e Irlanda lo harán mañana.
En España, las entidades financieras que abrieron ayer sus puertas se convirtieron en una parada obligada para los ciudadanos, que desafiaron la ola de frío reinante para salir a comprar sus primeros euromonederos a un precio de 2,000 pesetas (12,01 euros).
Aunque en pocos casos se llegaron a producir grandes colas ante las ventanillas, sí hubo fue una mayor afluencia de público que en un sábado normal, entre el que estuvo el secretario de Estado de Economía, José Folgado, que fue a una sucursal bancaria para comprar un euromonedero.
En España se produjeron en total 24 millones de euromonederos, con un valor facial de 288,5 millones de euros, lo que representa 1,032 millones de monedas con un peso aproximado de 10 toneladas.
Los euromonederos que se vendieron ayer en Austria se agotaron antes del mediodía en numerosas oficinas postales y bancos de guardia, así como en gasolineras de la compañía nacional OMV.
Los austríacos reaccionaron con entusiasmo ante el inicio del cambio de la calderilla de la futura moneda única europea, para lo que el Banco Nacional de Austria preparó 6 millones de euromonederos de 14.54 euros (200 chelines).
Con expresiones como "parece esto un asalto", "vaya horror" y "resulta increíble", los empleados de las oficinas postales y bancos de guardia describieron las primeras horas de venta.
Los primeros propietarios de la calderilla del euro coincidieron en destacar lo pequeñas y ligeras que son las nuevas monedas, su sorpresa por la combinación de colores en el metal y su agrado por el diseño elegido.
Desafiando a la lluvia y el frío, en Italia hubo largas colas frente a las oficinas postales -las entidades bancarias lo harán el lunes- para hacerse con los primeros euromonederos, un paquete de 53 monedas con un valor de 12.91 euros.
La mayoría de los ciudadanos que esperaban turno eran personas mayores, muchas de las cuales expresaron su interés en tocar cuanto antes la nueva moneda y prevenir así posibles futuros engaños.
Los belgas también pudieron comprar desde los primeros euromonederos por 500 francos belgas (12.40 euros) en las oficinas de correos y las ventanillas del metro de Bruselas y de la compañía ferroviaria, ya que los bancos no abrirán hasta el lunes.
Las empresas que quieran hacer un regalo estas Navidades a sus trabajadores podrán optar por entregarles un euromonedero, ya que obtendrán por ello exoneraciones fiscales.
En Finlandia, la distribución de euromonederos despertó gran interés, hasta el punto de formarse largas colas en los centros de venta. Cada uno de los 500,000 paquetes puestos a la venta tiene un precio de 23 marcos finlandeses (3.88 euros).
Las monedas de euro tienen un anverso común para todos los países de la unión monetaria y un reverso diferente para cada uno de ellos en el que se hace referencia a símbolos nacionales. No obstante, el hecho de que todas ellas sean válidas en los doce países de la unión monetaria hará que en poco tiempo estén repartidas por la zona euro.
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