'Las muelas del juicio' y sus mitos

Son los últimos molares ubicados a cada lado de los maxilares. También son los últimos dientes en aparecer o erupcionar y esto, generalmente, ocurre cuando la persona tiene entre 18 y 25 años. Su extracción no requiere de intervenciones excesivamente complicadas, pero sí del uso de anestesia y cirugía.

A un sinnúmero de personas nunca le llegan a erupcionar, afirmó Katherine Navarro, odontóloga panameña.

Según especialistas, con la masticación, los dientes se van desgastando tanto por la parte en la que masticamos como por la que se halla entre los dientes. Las muelas del juicio, al igual que el resto de los dientes, van avanzando para cubrir ese desgaste. Es un rasgo evolutivo ir perdiendo poco a poco estas muelas, puesto que actualmente los huesos maxilares son más pequeños y el desgaste que hacemos con la alimentación no requiere que tengamos que utilizar también esa muela, detalló a EFE Ana Suárez, odontóloga y profesora de la Universidad Europea de Madrid.

La extracción es uno de los procedimientos que más frecuentemente se realizan en Panamá. "No es doloroso, es más, solo sientes que una presión hacia afuera. Muchas personas llegan nerviosas y la anestesia no les funciona. Tenemos que ponerle más tubos. Después de la cirugía sí se siente dolor, pero se controla con fármacos", detalló Navarro.

Debido a la falta de espacio, las muelas del juicio pueden salir torcidas o emerger parcialmente. Si causan molestias o dolor severo es necesario concretar una cita con el dentista, quien las examinará y aconsejará si hay que extraerlas o no.

¿Cómo saber si están saliendo mal?

El hecho de que las muelas no puedan salir con gran facilidad provoca cierto dolor e hinchazón de la encía, así como el gran riesgo de infecciones y también caries al quedar algún espacio entre la encía y las muelas que quieren erupcionar, nos detalló la experta panameña.

Mitos

Una de las afirmaciones que más suele confundir a los pacientes es que deben extraerse siempre. Sin embargo, Navarro destaca que no es así. "Si hay espacio suficiente, no existe riesgo de una infección".

Suele pasar que si una muela del juicio se queda dentro del hueso, no da problemas, no necesita un tratamiento como tal, no se requiere de ninguna prótesis ni hay nada que vaya a molestar en esa zona. No será recomendable extraerla.

Para sacarlas -en ocasiones -hay que quitar hueso y requiere un postoperatorio. No es complicado, pero sí un poco molesto. Esto pasa en unos cuantos casos.

Otra de las creencias es que lo ideal es operarse antes de los 30 años, aunque esto no es del todo cierto. No hay un patrón claro, puede depender de muchas circunstancias, como la posición molar, el nervio dentario o las muelas adyacentes. Aunque sí es cierto que suele haber más dificultades entre los mayores de 25 años.

¿Pueden desplazar al resto de los dientes hasta cambiar la estructura de la dentadura?

Este es otro mito. Pueden influir, pero no es determinante.

Esta especialista, quien tiene años de experiencia en el campo, nos aclaró que las muelas del juicio pueden cumplir su función como cualquier diente, siempre y cuando estén excelentemente situadas.

¿Es necesario extraerlas cuando se pondrá frenos?

Sobre este caso, posiblemente, pero hay que hacer un estudio más profundo para ver si es necesario.