Raphael habló de la enfermedad que padeció
- Redacción / @PanamaAmerica
El cantante hace un repaso de su vida y su carrera sin omitir el momento más duro de su vida: la cirrosis hepática que casi le cuesta la vida y el trasplante que le salvó en 2003.

No lo había hecho hasta el momento, sin embargo el cantante Raphael decidió abrir su corazón a un medio español por el lanzamiento de su nuevo disco y contar las razones de su enfermedad hace unos años, cuando cayó muy enfermo del hígado, se le veía demacrado y esperaba un transplante que le salvara la vida, por causa de una cirrosis hepática.
"Mi enfermedad era muy traicionera y no daba la cara. Yo no he bebido nunca ni he fumado. Yo no soy bebedor, pero empecé a beber botellitas de esas pequeñas de los hoteles porque me hacían dormir. Cuando empecé a notar síntomas de cosas jamás pensé en el dichoso botellín para dormir", ha explicado Raphael.
Raphael confesó, que aunque notaba los síntomas, tampoco quiso enterarse nunca de ellos. Incluso, el cantante llegó a ocultar su enfermedad a su mujer, Natalia Figueroa, porque en ese momento se encontraba viviendo en un hotel de Barcelona. "Yo alargaba los viajes. Decía 'no voy esta semana a Madrid". "Terminé en Valencia y me fui corriendo al hospital y ahí salió todo. Allí, según ha narrado visiblemente emocionado, su amiga íntima Rocío Jurado fue una de las personas en decirle que no estaba bien.
"No quería someterme a un transplante. Finalmente lo tuve que hacer, porque sino iba a morir. El día de la operación fue de vida o muerte, o llegaba el hígado, o no podía continuar viviendo. Es curioso que fue Rocío Jurado la que me dijo que no estaba bien, y ahora es ella la que no está aquí con nosotros", expresó.
Tras pasar por este trágico momento, hasta ahora ha decidio desahogarse. Desde entonces, se ha convertido en un abanderado y defensor del sistema de donación de órganos.
Para comentar debes registrarte y completar los datos generales.