Ahorcan a subalternos de Saddam

ORIENTE MEDIO: Uno de ellos es decapitado
Ahorcan a subalternos de Saddam
Las ejecuciones se realizaron en el mismo edificio en donde Hussein había sido colgado.
Bagdad
EFE
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DOS SUBALTERNOS de Saddam Hussein fueron ahorcados antes del amanecer del lunes y uno de ellos, Barzan Ibrahim al-Tikriti, medio hermano del ex dictador y antiguo jefe del servicio de seguridad nacional, fue decapitado al caer.
El vídeo oficial del ahorcamiento, difundido para la prensa el lunes, muestra cómo el medio hermano del derrocado dictador fue decapitado durante la ejecución.
El cadáver de Al-Tikriti es mostrado debajo del patíbulo, su cabeza a pocos metros de su torso.
En el vídeo aparecen Al-Tikriti y Awad Hamed al-Bandar, presidente del Tribunal Revolucionario de Irak, cuando eran ahorcados uno al lado del otro.
Ambos vestían overoles rojos. Cuando se acercaban al cadalso, les fueron colocadas capuchas negras sobre sus cabezas.
Cinco hombres enmascarados los rodeaban.
Tras abrirse las escotillas colocadas en el piso del cadalso, pudo verse que el cadáver de Al-Bandar pendía de la cuerda. En cambio, el cadáver de Al-Tikriti yacía en el suelo, de espaldas, y su cabeza estaba a algunos metros de distancia.
El portavoz del gobierno, Ali al Dabag, no ahorró un detalle macabro que no dejará de encender los ánimos en Irak y el mundo árabe: en el momento del ahorcamiento, Al-Tikriti, enfermo de cáncer desde hace más de un año, perdió la cabeza, seccionada completamente del resto del cuerpo, luego que la soga de la horca desgarrara al condenado.
La ejecución se llevó a cabo en el mismo sitio donde Saddam fue ahorcado el 30 de diciembre, en una caótica escena que causó consternación a nivel mundial.
Al confirmar las ejecuciones, el vocero del gobierno iraquí Ali al-Dabbagh admitió que "en un raro incidente", la cabeza de Ibrahim quedó separada del torso durante el ahorcamiento.
El anuncio de la ejecución, y su truculenta secuela causó indignación en miembros de la comunidad suní, en tanto la mayoría chií, que fue perseguida durante el régimen de Saddam, expresó su alegría.
Khalaf al-Olayan, líder del principal bloque suní en el parlamento, exigió ver el video tomado durante la ejecución.
"Es imposible que una persona sea decapitada durante un ahorcamiento", declaró a la emisora de televisión árabe Al-Jazeera. "Eso demuestra que (el gobierno) mutiló el cadáver y esa es una violación de la ley".
Añadió que "deseamos ver el vídeo que fue tomado durante la ejecución de ambos hombres a fin de que (el gobierno) demuestre lo que está diciendo".
Azzam Saleh Abdula, el yerno de Al-Tikriti, dijo que "nos enteramos" de la ejecución "por los medios de prensa. Debíamos haber sido informados un día antes, pero al parecer este gobierno ignora las normas".
Abdula indicó que las ejecuciones reflejan el odio que muestra el gobierno liderado por los chiítas. "Ellos quieren derramar todavía más sangre iraquí", declaró. "Al diablo con esta democracia", agregó.
Los dos ejecutados del lunes, junto con Saddam, fueron declarados culpables de la matanza de 148 chiítas tras un intento de asesinato al ex dictador en el poblado de Dujail, al norte de Bagdad, en 1982.
El portavoz gubernamental dijo que entre las personas que presenciaron la ejecución figuraban un fiscal, un juez y un médico, y que todas las leyes y normas fueron respetadas durante el ahorcamiento.
La policía iraquí informó que los cadáveres de Al-Tikriti y Al-Bandar habían sido transportados desde Bagdad a una base militar norteamericana en Tikrit previo al entierro en Ouja. Tikrit se halla a 130 kilómetros al norte de Bagdad.
Los dos acusados iban a ser colgados junto con Saddam el 30 de diciembre, pero las autoridades iraquíes decidieron ejecutar a Hussein solo.