Estado de Alabama ejecuta primera mujer desde 1957

Lynda Lyon Block, de 54 años, fue ejecutada ayer en la silla eléctrica de la cárcel Holman de la localidad de Atmore (Alabama), y se convirtió en la primera mujer a quien se aplica la pena capital en este estado sureño desde 1957.
Block, condenada por el asesinato de un policía en 1993, fue la última persona obligada a morir en la silla eléctrica en Alabama, después de que el año pasado se aprobara la inyección letal como segunda alternativa a la aplicación de la pena capital.
Nebraska queda así como el único Estado de la nación en el que se seguirá electrocutando a los condenados a muerte. La mujer ejecutada fue declarada culpable, junto a su compañero sentimental George Sibley, de asesinar en un estacionamiento de la localidad de Opelike al agente de policía Roger Motley Jr., cuando éste se acercó al coche en el que se encontraban.
La pareja estaba prófuga en ese momento tras haber sido declarada culpable del apuñalamiento del ex marido de Block en Florida. Tanto Block como Sibley, quien está actualmente en el corredor de la muerte de la cercana prisión de Donaldson, rechazaron ser defendidos al no aceptar la legitimidad de las autoridades federales e incluso renunciaron a la ciudadanía estadounidense.
Anna Motley, la madre del policía asesinado, expresó su satisfacción tras la ejecución y afirmó que "la Biblia dice que cuando se comete un asesinato y la persona que lo ha cometido no demuestra arrepentimiento, tiene que ser ejecutada inmediatamente".