Finaliza asedio en Belén
Publicado 2002/05/10 23:00:00
- Redacción CrÃtica
Las tropas israelíes completaron ayer su retirada de la ciudad cisjordana de Belén, varias horas después de poner fin al asedio de la Basílica.
El asedio de la basílica de la Natividad en Belén concluyó en la mañana de ayer con la partida de los 123 palestinos que estaban allí atrincherados desde el 2 de abril. La crisis de Belén concluyó ayer por la mañana con la salida de todos los palestinos sitiados, entre ellos 13 activistas considerados "peligrosos" por Israel, que viajaron a Chipre a bordo de un avión militar británico desde donde serán enviados a países de acogida.
Uno a uno, los palestinos salieron de la iglesia. Inmediatamente después de haber franqueado el umbral de la puerta, subieron a bordo de un autobús aparcado en las cercanías, bajo la atenta mirada de los soldados israelíes.
Los 13 fueron conducidos al aeropuerto Ben Gurion de Tel Aviv, embarcados a bordo de un avión militar británico que los trasladó a Chipre, donde se alojaron en un hotel frente al mar, primera etapa de su exilio hacia, probablemente, varios países europeos. Escoltados por el ejército, otros 26 palestinos, considerados menos peligrosos, fueron llevados hasta la franja de Gaza, donde fueron recibidos como héroes. Otros 24, a los que Israel, en principio, no acusa de nada, quedaron libres tras un simple control de identidad.
Diez militantes extranjeros pro-palestinos, que se quedaron en la iglesia tras la salida de los palestinos, abandonaron a su vez el recinto. Acusados de entrar en "zona militar cerrada", fueron detenidos por la policía israelí a la espera de su expulsión.
Fuentes de la jerarquía católica en Tierra Santa, pudieron observar durante una primera inspección ocular que la Basílica, contiene en su interior "basura para llenar un camión". "Como tenían miedo a moverse por los disparos, los palestinos han hecho sus necesidades en cualquier sitio", explicaron.
Asimismo, en la Basílica hay "muchos cristales rotos y pequeños daños en un mosaico", pero los objetos sacros no han sido expoliados como denunciaba el Ejército, refirieron. La cerradura de hierro del convento franciscano ha sido reventada a tiros por los milicianos y de la hospedería para los peregrinos, también franciscana, llamada "Casa Nova", se han llevado todas las mantas para abrigarse durante la noche, dijeron.
El salón parroquial de la orden franciscana ha resultado muy dañado a causa de un incendio provocado por un artefacto explosivo lanzado por las tropas israelíes desde el exterior del recinto, aunque no ha podido ser claramente inspeccionado porque Israel no ha devuelto aún la electricidad a la Basílica de la Natividad.
El ejército israelí aplazó el lanzamiento de una ofensiva en la Franja de Gaza, sobre todo porque ya perdió el efecto sorpresa, afirmó la televisión estatal israelí. Según la televisión, la operación militar fue suspendida, pero importantes fuerzas siguen desplegadas alrededor de ese territorio, preparadas para intervenir. El propio ministro israelí de Defensa, Benyamin Ben Eliezer, decidió postergar la operación "debido a filtraciones", indicó una fuente de seguridad.
Expertos norteamericanos que ingresaron en el complejo de la Basílica de la Natividad, luego de que salieran todos los palestinos allí refugiados, "encontraron artefactos explosivos", declaró el capitán Ron Edelheit, portavoz del ejército israelí.
111 Los 26 considerados delincuentes de menor importancia por Israel fueron expulsados de Cisjordania y trasladados en un autobús blindado a la Franja de Gaza, donde fueron recibidos como héroes por multitudes que ondeaban banderas y donde serán alojados en un elegante hotel costero.
"Los norteamericanos encontraron artefactos explosivos en el complejo y se encargaron de algunos de ellos", declaró el militar a la prensa. El capital Edelheit no pudo precisar la cantidad de artefactos explosivos que habían sido colocados y tampoco si estaban puestos en la basílica o en los conventos aledaños.
Dos palestinos causaron ayer heridas a 13 personas al lanzar una carga explosiva en el casco viejo de la ciudad de Beersheva, en el sur de Israel, antes de ser apresados por agentes de la policía. Se trata del segundo ataque palestino en una ciudad de Israel en las últimas 72 horas y cuando la ciudadanía de este país, sacudida por una ola de sangrientos atentados el pasado marzo, parecía recuperar la seguridad tras la "Operación Muro de Defensa", la gran ofensiva militar del mes de abril en ciudades de Cisjordania. Uno de los dos atacantes también resultó herido al ser golpeado por israelíes en el casco antiguo de esa localidad, la "capital del desierto" meridional del Néguev.
Uno a uno, los palestinos salieron de la iglesia. Inmediatamente después de haber franqueado el umbral de la puerta, subieron a bordo de un autobús aparcado en las cercanías, bajo la atenta mirada de los soldados israelíes.
Los 13 fueron conducidos al aeropuerto Ben Gurion de Tel Aviv, embarcados a bordo de un avión militar británico que los trasladó a Chipre, donde se alojaron en un hotel frente al mar, primera etapa de su exilio hacia, probablemente, varios países europeos. Escoltados por el ejército, otros 26 palestinos, considerados menos peligrosos, fueron llevados hasta la franja de Gaza, donde fueron recibidos como héroes. Otros 24, a los que Israel, en principio, no acusa de nada, quedaron libres tras un simple control de identidad.
Diez militantes extranjeros pro-palestinos, que se quedaron en la iglesia tras la salida de los palestinos, abandonaron a su vez el recinto. Acusados de entrar en "zona militar cerrada", fueron detenidos por la policía israelí a la espera de su expulsión.
Fuentes de la jerarquía católica en Tierra Santa, pudieron observar durante una primera inspección ocular que la Basílica, contiene en su interior "basura para llenar un camión". "Como tenían miedo a moverse por los disparos, los palestinos han hecho sus necesidades en cualquier sitio", explicaron.
Asimismo, en la Basílica hay "muchos cristales rotos y pequeños daños en un mosaico", pero los objetos sacros no han sido expoliados como denunciaba el Ejército, refirieron. La cerradura de hierro del convento franciscano ha sido reventada a tiros por los milicianos y de la hospedería para los peregrinos, también franciscana, llamada "Casa Nova", se han llevado todas las mantas para abrigarse durante la noche, dijeron.
El salón parroquial de la orden franciscana ha resultado muy dañado a causa de un incendio provocado por un artefacto explosivo lanzado por las tropas israelíes desde el exterior del recinto, aunque no ha podido ser claramente inspeccionado porque Israel no ha devuelto aún la electricidad a la Basílica de la Natividad.
El ejército israelí aplazó el lanzamiento de una ofensiva en la Franja de Gaza, sobre todo porque ya perdió el efecto sorpresa, afirmó la televisión estatal israelí. Según la televisión, la operación militar fue suspendida, pero importantes fuerzas siguen desplegadas alrededor de ese territorio, preparadas para intervenir. El propio ministro israelí de Defensa, Benyamin Ben Eliezer, decidió postergar la operación "debido a filtraciones", indicó una fuente de seguridad.
Expertos norteamericanos que ingresaron en el complejo de la Basílica de la Natividad, luego de que salieran todos los palestinos allí refugiados, "encontraron artefactos explosivos", declaró el capitán Ron Edelheit, portavoz del ejército israelí.
111 Los 26 considerados delincuentes de menor importancia por Israel fueron expulsados de Cisjordania y trasladados en un autobús blindado a la Franja de Gaza, donde fueron recibidos como héroes por multitudes que ondeaban banderas y donde serán alojados en un elegante hotel costero.
"Los norteamericanos encontraron artefactos explosivos en el complejo y se encargaron de algunos de ellos", declaró el militar a la prensa. El capital Edelheit no pudo precisar la cantidad de artefactos explosivos que habían sido colocados y tampoco si estaban puestos en la basílica o en los conventos aledaños.
Dos palestinos causaron ayer heridas a 13 personas al lanzar una carga explosiva en el casco viejo de la ciudad de Beersheva, en el sur de Israel, antes de ser apresados por agentes de la policía. Se trata del segundo ataque palestino en una ciudad de Israel en las últimas 72 horas y cuando la ciudadanía de este país, sacudida por una ola de sangrientos atentados el pasado marzo, parecía recuperar la seguridad tras la "Operación Muro de Defensa", la gran ofensiva militar del mes de abril en ciudades de Cisjordania. Uno de los dos atacantes también resultó herido al ser golpeado por israelíes en el casco antiguo de esa localidad, la "capital del desierto" meridional del Néguev.
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