Reñidas elecciones en Alemania
Publicado 2002/09/22 23:00:00
- Buenos Aires
La coalición gubernamental saliente socialdemócrata-verdes del canciller Gerhard Schroeder confirmó su ventaja en las legisltavias alemanas ante la oposición conservadora de Edmund Stoiber con una diferencia de tres escaños, según una estimación considerada como estable por la televisión pública.
Al término del gran suspense de las elecciones legislativas más reñidas de la historia de Alemania, el gobierno saliente del SPD y los verdes contaría con 304 de los 601 escaños, según esa estimación, frente a los 297 de la oposición demócratacristiana CDU-CSU aliada con los liberales y los dos de los necomunistas del PDS.
El SPD del canciller saliente sacará partido fundamentalmente del buen resultado obtenido por los verdes, que lograron los mejores resultados de su historia.
La noche electoral se presentaba larga y emocionante en Alemania. Las estimaciones de voto divulgadas por las cadenas de televisión mostraban una pequeñísima ventaja de los conservadores sobre los socialdemócratas. Pero los resultados de Los Verdes, socios del Gobierno de Schroder, son mejores que los de los Liberales, potenciales aliados de Stoiber, lo que hace imposible inclinar la balanza a un lado u otro.
Pero los datos ofrecidos por las televisiones oscilan constantemente. Las últimas informaciones -de las 22.00 horas- dan como fuerza ganadora a la CDU/CSU de Stoiber, con un 38.8% de los votos. Sus potenciales aliados obtendrían el 7.4%.
Enfrente, el Partido Socialdemócrata (SPD) de Schröder conseguiría el 38.1% de los sufragios y podría mantenerse en el poder con el 8.6% aportado por Los Verdes. Aún así, el retroceso experimentado por el SPD es evidente -en 1998 consiguió un 40,9% de los votos- y el canciller alemán se ha reconocido responsable de ello.
Según estas estimaciones, la participación electoral de ayer sería del 77%, en comparación con el 82.2% de 1998. Estas han sido las elecciones más reñidas de la historia de la República federal. Se trata de la décimoquinta cita electoral de la postguerra y la cuarta desde la reunificación alemana, en 1990.
Los ganadores morales de estas elecciones son, sin duda, Los Verdes y su cabeza de lista, Joschka Fischer, no sólo por subir frente a los comicios de hace cuatro años, sino porque de ellos depende la salvación de la coalición actual.
Sin duda, el deterioro que ha sufrido la relación de Alemania con Estados Unidos será uno de los principales problemas que deberá afrontar el próximo gobierno.
Al término del gran suspense de las elecciones legislativas más reñidas de la historia de Alemania, el gobierno saliente del SPD y los verdes contaría con 304 de los 601 escaños, según esa estimación, frente a los 297 de la oposición demócratacristiana CDU-CSU aliada con los liberales y los dos de los necomunistas del PDS.
El SPD del canciller saliente sacará partido fundamentalmente del buen resultado obtenido por los verdes, que lograron los mejores resultados de su historia.
La noche electoral se presentaba larga y emocionante en Alemania. Las estimaciones de voto divulgadas por las cadenas de televisión mostraban una pequeñísima ventaja de los conservadores sobre los socialdemócratas. Pero los resultados de Los Verdes, socios del Gobierno de Schroder, son mejores que los de los Liberales, potenciales aliados de Stoiber, lo que hace imposible inclinar la balanza a un lado u otro.
Pero los datos ofrecidos por las televisiones oscilan constantemente. Las últimas informaciones -de las 22.00 horas- dan como fuerza ganadora a la CDU/CSU de Stoiber, con un 38.8% de los votos. Sus potenciales aliados obtendrían el 7.4%.
Enfrente, el Partido Socialdemócrata (SPD) de Schröder conseguiría el 38.1% de los sufragios y podría mantenerse en el poder con el 8.6% aportado por Los Verdes. Aún así, el retroceso experimentado por el SPD es evidente -en 1998 consiguió un 40,9% de los votos- y el canciller alemán se ha reconocido responsable de ello.
Según estas estimaciones, la participación electoral de ayer sería del 77%, en comparación con el 82.2% de 1998. Estas han sido las elecciones más reñidas de la historia de la República federal. Se trata de la décimoquinta cita electoral de la postguerra y la cuarta desde la reunificación alemana, en 1990.
Los ganadores morales de estas elecciones son, sin duda, Los Verdes y su cabeza de lista, Joschka Fischer, no sólo por subir frente a los comicios de hace cuatro años, sino porque de ellos depende la salvación de la coalición actual.
Sin duda, el deterioro que ha sufrido la relación de Alemania con Estados Unidos será uno de los principales problemas que deberá afrontar el próximo gobierno.
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