Uso ilegal de cilindro de gas
Publicado 2005/09/06 23:00:00
- Omaira De León Watson
Los cilindros de gas licuado de 25 libras, subsidiados por el Estado, son solo para uso residencial.
SIN MEDIR LAS consecuencias del peligro que ello representa, algunos comerciantes están utilizando como fuente de energía en las cocinas de restaurantes, hornos y lavanderías, tanques de gas licuado de 25 libras, los que adaptan para utilizar, cuatro de ellos, en vez del cilindro estacionario de mayor capacidad.
El Panamá América conversó con el sargento primero Víctor Moreno, de la Oficina de Seguridad del Cuerpo de Bomberos de Panamá, quien explicó que luego de inspecciones de rutina y por denuncias de la comunidad, pudieron comprobar en algunos locales, ubicados en Tocumen, Felipillo, Brisas del Golf, Las Acacias y otros sectores, el uso indebido de los cilindros de gas licuado.
Como parte de las investigaciones en el sector de Chivo-Chivo detectaron a una persona que traspasaba gas licuado de 3 tanques de 25 libras a los grandes de 60, utilizando para ello toda la técnica de un experto, pero que al final le falló porque el constante olor a gas alertó a los vecinos, quienes se quejaron con los bomberos.
Como norma de seguridad, los locales comerciales deben utilizar cilindros estacionarios, y ubicarlos en un lugar con ventilación y bajo más medidas de seguridad establecidas por los bomberos, según lo estipulado en el artículo 44-9 del reglamentación sobre el uso de los gases comprimidos.
Los inspectores de la Oficina de Seguridad decomisaron en lavanderías y restaurantes, conexiones con las que sacaban gas de cuatro cilindros de 25 libras, que son más baratos, para no comprar uno de 60 libras.
De acuerdo con autoridades de la Oficina de Seguridad del Cuerpo de Bomberos, al abastecer un quemador de alta temperatura con cilindros más pequeños se está forzando la válvula del mismo, lo que provoca la denominada "fatiga metálica" que a su vez puede causar una explosión por dicho debilitamiento.
A pesar de los llamados de atención del decomiso de los equipos y la aplicación de las sanciones, los comerciantes continúan con esta práctica exponiendo sus vidas y las de sus clientes, por lo que se gestiona con la Policía Nacional el cierre de todos los establecimientos que incurran en esta práctica peligrosa.
La Oficina de Seguridad del Cuerpo de Bomberos hace un llamado a la comunidad para que denuncien casos como éstos, ya que sus vidas también podrían estar en peligro.
Recientemente, unidades del Cuerpo de Bomberos de Panamá decomisaron 50 tanques de gas a un ciudadano extranjero, quien se dedicaba a la venta ilegal de gas licuado.
Las medidas de seguridad señalan la prohibición de tener tantos tanques de gas en una residencia.
El involucrado fue citado a la Oficina de Seguridad de los bomberos al igual que el ciudadano que trasegaba gas licuado de los tanques pequeños a los cilindros de 60 libras.
Esta actividad es además una estafa en contra de las compañías dedicadas a la distribución de gas licuado en el país, y pone en peligro la vida y seguridad de quienes residen en los alrededores.
El artículo 44-9 del reglamento sobre gases comprimidos señala que toda persona que quiera instalar y hacer funcionar aparatos o maquinarias para la producción de gases comprimidos, necesita tener permiso de la Oficina de Seguridad.
Los tanques de gas con reguladores y mangueras en mal estado también son peligrosos y deben ser cambiados.
El Panamá América conversó con el sargento primero Víctor Moreno, de la Oficina de Seguridad del Cuerpo de Bomberos de Panamá, quien explicó que luego de inspecciones de rutina y por denuncias de la comunidad, pudieron comprobar en algunos locales, ubicados en Tocumen, Felipillo, Brisas del Golf, Las Acacias y otros sectores, el uso indebido de los cilindros de gas licuado.
Como parte de las investigaciones en el sector de Chivo-Chivo detectaron a una persona que traspasaba gas licuado de 3 tanques de 25 libras a los grandes de 60, utilizando para ello toda la técnica de un experto, pero que al final le falló porque el constante olor a gas alertó a los vecinos, quienes se quejaron con los bomberos.
Como norma de seguridad, los locales comerciales deben utilizar cilindros estacionarios, y ubicarlos en un lugar con ventilación y bajo más medidas de seguridad establecidas por los bomberos, según lo estipulado en el artículo 44-9 del reglamentación sobre el uso de los gases comprimidos.
Los inspectores de la Oficina de Seguridad decomisaron en lavanderías y restaurantes, conexiones con las que sacaban gas de cuatro cilindros de 25 libras, que son más baratos, para no comprar uno de 60 libras.
De acuerdo con autoridades de la Oficina de Seguridad del Cuerpo de Bomberos, al abastecer un quemador de alta temperatura con cilindros más pequeños se está forzando la válvula del mismo, lo que provoca la denominada "fatiga metálica" que a su vez puede causar una explosión por dicho debilitamiento.
A pesar de los llamados de atención del decomiso de los equipos y la aplicación de las sanciones, los comerciantes continúan con esta práctica exponiendo sus vidas y las de sus clientes, por lo que se gestiona con la Policía Nacional el cierre de todos los establecimientos que incurran en esta práctica peligrosa.
La Oficina de Seguridad del Cuerpo de Bomberos hace un llamado a la comunidad para que denuncien casos como éstos, ya que sus vidas también podrían estar en peligro.
Recientemente, unidades del Cuerpo de Bomberos de Panamá decomisaron 50 tanques de gas a un ciudadano extranjero, quien se dedicaba a la venta ilegal de gas licuado.
Las medidas de seguridad señalan la prohibición de tener tantos tanques de gas en una residencia.
El involucrado fue citado a la Oficina de Seguridad de los bomberos al igual que el ciudadano que trasegaba gas licuado de los tanques pequeños a los cilindros de 60 libras.
Esta actividad es además una estafa en contra de las compañías dedicadas a la distribución de gas licuado en el país, y pone en peligro la vida y seguridad de quienes residen en los alrededores.
El artículo 44-9 del reglamento sobre gases comprimidos señala que toda persona que quiera instalar y hacer funcionar aparatos o maquinarias para la producción de gases comprimidos, necesita tener permiso de la Oficina de Seguridad.
Los tanques de gas con reguladores y mangueras en mal estado también son peligrosos y deben ser cambiados.
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