Diputados utilizan figura de las licencias para ausentarse

Las licencias laborales se han convertido en el mejor mecanismo para justificar las ausencias en el pleno de la Asamblea Nacional. Al menos así lo revela un informe de los últimos cuatro meses de sesiones ordinarias, que se publicó en el web “www.asamblea.gob.pa” de ese órgano del Estado.

El diputado de Cambio Democrático (CD), Sergio "Chello" Gálvez, encabeza la lista de los diputados que trataron de esconder su ausentismo en la figura de las licencias.

Le sigue muy cerca su colega panameñista, Ricardo Valencia, y de otro miembro del oficialismo, José Lozada, uno de los nueve diputados del Partido Revolucionario Democrático (PRD) que saltó al partido que mantiene el control en el Gobierno.

Si bien Lozada aparece en el segundo lugar con mayor solicitud de licencias, el diputado que registra la mayor cantidad de ausencias es Juan Antonio Martínez, de Kuna Yala, el otro político que hace poco se cambió de tolda, del PRD al oficialista CD. (Ver gráfica)

En cualquier empresa -según consta en el Código de Trabajo- o incluso en el sector público, cuando se solicita una licencia, ese tiempo que no se labora en la institución o en la compañía no se paga (con excepción de algunos casos de licencias con sueldo); pero en el Legislativo ocurre todo lo contrario, pues esos días son reconocidos a los diputados como una jornada laboral completa.

Lo admiten.
El propio presidente de la Asamblea Nacional, José Muñoz, reconoce que la única forma en que se le puede descontar el día a sus colegas es que no haya quórum deliberativo (17 votos), de lo contrario, el salario no registrará variación alguna.

Explicó que en ese caso, a los únicos que se les pagaría el día laboral sería a los que asistieron, al resto se les descontaría el día, pero eso no se ha logrado hacer desde que se aprobó la norma en la administración del panameñista José Luis Varela en el 2010. La razón: casi siempre cuando se hace el tercer llamado hay quórum deliberativo, con el cual se puede discutir, pero no votar los proyectos o propuestas que estén en debate en el orden del día.

Para Muñoz, el ausentismo fue su peor enemigo para cumplir con todo lo que se propuso en su gestión, pero está consciente de que no es fácil terminar con esa práctica que atenta contra los recursos del Estado.

El diputado de CD no excluye a nadie y cree que tanto sus colegas de gobierno como de oposición deben ser más responsables y cumplir con el mandato otorgado por el electorado, a quienes se deben.

El presidente del órgano Legislativo destacó que muchos de los que piden licencias alegan que acuden a viajes al exterior, y otros que necesitan días para atender a sus circuitos, pero al final lo importante, según su punto de vista, es que si no pueden asistir, que habiliten a sus suplentes, pero muy pocos lo hacen.

Muñoz, incluso, habla de proponer que se reforme el Reglamento Interno de la Asamblea para que se descuente a todo aquel que no asista al pleno legislativo, pero está consciente de que es una iniciativa que va a tener resistencia por parte sus colegas.

Sobre el tema, el candidato a presidente de la Asamblea Nacional, Alcibiades Vásquez, dijo que lo que intentará hacer es conciliar con sus colegas, más que imponer una medida de descontar, para que asistan a las sesiones.

Por su parte, el perredista Leandro Ávila consideró que el ausentismo se debe a un problema de formación, ya que muchos diputados llegan y no saben que tienen que cumplir con el electorado.

En tanto, Janibel Ábrego, de CD, destaca que si bien ella a veces falta al Pleno, en esos momentos habilita a su suplente Maximino Rodríguez, a fin de que la curul siempre esté representada.

Antes del 2004, la Constitución Política establecía que los diputados contaban con dos suplentes, algo que se redujo a uno en la última reforma, no obstante, el presidente del Legislativo es de la opinión de que no hay excusas para que las curules estén vacías y se impida que se aprueben medidas, a veces urgentes, para la población.

Sin tomar en cuenta las licencias, en esta segunda Legislatura del segundo período, el diputado Luis Corbillón, suplente del que es ministro de Desarrollo Social, Guillermo Ferrufino, es el que más, con 21 inasistencias, ha faltado en el Pleno, seguido de su copartidario Juan Antonio Martínez con 20.

En medio del debate por el ausentismo que es criticado por los propios diputados, tanto de gobierno como de oposición, algunos consideran que la mejor opción es descontar en aquellos casos que el principal no habilite a su suplente o no pueda justificar su falta, pero es una propuesta que aún tiene que esperar que se instale el nuevo período legislativo que empieza el próximo 1 de julio.