El Parque Urracá dejó de ser el paraíso de hace años
- Esther Ortega
Un lugar donde antes se formaron deportistas y muchas familias gozaron, hoy es sitio peligroso. No tiene mayor vigilancia, aunque sí es cuidado y limpiado por el municipio de Panamá.
I r a disfrutar de la naturaleza, O pasar el rato haciendo ejercicios al aire libre en el parque Urracá, ya no es tan agradable como hace unos años atrás, pues los olores a orín y excremento son tan insoportables que le quitan las ganas a cualquiera.
Solo basta caminar unos cuantos metros y pasar cerca a sus frondosos árboles de este emblemático parque ubicado en el centro de la ciudad para sentir el “berrinche” bien fuerte y más si el sol está bien caliente.
Jacinto Moreno, quien por 10 años consecutivos se ha dedicado al mantenimiento del parque manifestó que al principio se molestaba cuando encontraba heces fecales, mientras realizaba el recogido de las hojas que caen de los árboles, pero ya se ha acostumbrado a limpiar los regalitos que dejan las personas.
Indicó que la falta de vigilancia ha hecho del sitio un baño público pues no importa si es de día o de noche, las personas buscan los árboles de Fico para evacuar sus necesidades fisiológicas.
Moreno, dice le ha tocado ver mujeres adultas, jóvenes y hasta adolecentes a plena luz del día orinando entre los arbustos que están alrededor de los árboles sin vergüenza alguna de que las personas que están en el sitio las vean.
De acuerdo con Moreno, algunas veces que le ha llamado la atención a las personas por realizar estas prácticas inadecuadas en las áreas públicas y le ha tocado recibir insultos y amenazas de toda índole. Ha llegado a recibir denuncias por irrespeto ante las autoridades del Municipio.
“Hace unos días le dije a una señora que recogiera las heces de su perro y me contestó groseramente que agradeciera que su mascota se orinaba y defecaba en el lugar, pues este es abono para las plantas” expresó
Según cuenta este señor quien de lunes a viernes recoge unas 30 bolsas de basura del parque Urracá hay días en que los olores de excremento y orín de las personas y de los perros son tan insoportables que le quitan las ganas de comer.
Por su parte Susana Martínez quien también se dedica al mantenimiento del parque expresó que pese a que el parque cuenta con letreros para que las personas recojan excreta de sus mascotas nadie cumple con la norma.
Según Martínez la junta comunal de Bella Vista es la responsable de colocar las bolsas para que las personas depositen las heces de los perros, sin embargo solo una vez hicieron su labor.
Más Problemas.
Sumando al problema de los malos olores con el que tienen que convivir las personas que a diario concurren en el parque, cada vez que llueve este se inunda lo que deteriora los juegos que hay para los niños.
Elizabeth Garay, quien desde hace dos años vende chichas y empanadas en el parque dijo que el agua sube hasta más arriba de las llantas de los autos por lo que le toca poner unas tablas para poder seguir vendiendo.
A juicio de Garay, las inundaciones se dan debido a las múltiples construcciones de edificios en el sector las cuales depositan caliche y cemento en las alcantarillas por lo que obstruyen los drenajes.
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