Urbanizaciones y limpieza de la Bahía causan inundaciones
También se menciona la ocupación de manglares, sin embargo, se han presentado una serie de medidas para evitar que las crecidas del río Juan Díaz afecten las barriadas que están cerca de su cauce.
- Ginebra
- - Publicado: 14/11/2010 - 05:46 am
El desarrollo urbanístico, la ocupación de áreas de reservorios y manglares y los trabajos de saneamiento de la Bahía de Panamá son causantes de las inundaciones que se han suscitado en los últimos meses en el sector de Panamá Este.
Lo anterior se desprende del estudio denominado Diagnóstico y Medidas de Protección para las Cuencas de los ríos Juan Díaz, Tocumen y Cabra, elaborado por el grupo venezolano denominado CALTEC, a pedido del Ministerio de Obras Públicas.
La investigación elaborada en un período de tres meses a un costo de B/ 100 mil, recoge medidas de mitigación a corto, mediano y largo plazo, tomando en cuenta las características hidrológicas y el desarrollo urbanístico que se ha dado en el sector, detalló la ingeniera Vivian Young, del MOP.
El estudio arrojó que las construcciones muy cercanas al río Juan Díaz han disminuido su cauce y han creado una garganta en el área del centro comercial Los Pueblos, por lo que se sugiere la sustitución del puente interno (moverlo) y elevar su altura.
El área de Juan Díaz constituye el punto donde con urgencia hay que tomar medidas debido al alcance de las afectaciones.
Se recomienda que desde el puente de la Vía José Agustín Arango hacia la desembocadura, mantenga una servidumbre de 104 metros.
Recomendaciones.
El estudio recomendó las construcciones de talud, canalización y dragado de los ríos y represas de amortiguamiento en el río Juan Díaz y Cabra. Así como la canalización de las aguas pluviales.
También sugiere mantener el control de las aguas a través de una represa que se construirá en el río María Prieta, y así disminuir el cauce original, sobre todo cuando llueve en la parte norte.
Otras de las medidas es canalizar el ancho del río a 35 metros en toda el área de Los Pueblos y la canalización de la Vía José A. Arango hasta 1,000 metros aguas abajo del Corredor Sur.
También se recomendó la colocación de una berma o pared de bloques en Villa Venus y San Antonio, en el sector de La Pradera.
Se analiza la colocación de una válvula “chek-ball” similar a unas compuertas en el sector este de Villa Venus para proteger la salida del río Juan Díaz. Esto evitaría que el agua se devuelva.
Tocumen-Tapia.
En las urbanizaciones La Montería, Los Caobos, Bello Horizonte y Teremar debe construirse una protección con bulder y hormigón.
El informe sugiere la canalización continua del río Tocumen.
En cuanto al puente del Corredor Sur, se recomendó eliminar el talud izquierdo aguas abajo y dragar el cauce aguas arriba; y en el sector de Torremolinos, edificar un talud izquierdo y completar la protección desde la carretera Panamericana hasta la Avenida Domingo Díaz.
Un punto importante es revisar la capacidad de canalización que bordea el Aeropuerto de Tocumen ante los nuevos desarrollos que aumentan el caudal de escurrimiento.
Río Cabra.
La posible canalización del río Cabra debe ser evaluada desde la nueva carretera Panamericana hasta el Corredor Sur, o la construcción de un embalse de amortiguación o represa.
También se sugiere aplicar un plan rector de drenaje en la zona oeste y sur del río porque es muy extensa.
Para el sector del Barrio Nueva Esperanza se recomienda construir una berma o pared de bloques trabados en la margen derecha de 1.20 metros de altura entre el Corredor Sur y la quebrada Brooklyn.
La ingeniera Vivian Young señaló que se harán estudios similares para analizar la situación de otros ríos de la capital como el Matasnillo, Tapia, Matías Hernández, Curundú y San Bernardino, Martín Sánchez y Aguacate, en el sector oeste de la provincia.
Para comentar debes registrarte y completar los datos generales.