Venezuela prohibirá la pesca de arrastre a partir del próximo 14 de marzo

La pesca de arrastre en Venezuela quedará prohibida a partir del próximo 14 de marzo, de conformidad con lo establecido en la vigente Ley de Pesca y Acuicultura, informó hoy el Gobierno de ese país.

El ministro de Agricultura y Tierras, Elías Jaua, anunció además que ese mismo día entrará en operaciones la naciente Empresa Pesquera del ALBA, conformada por Venezuela y Cuba.

El próximo viernes 13 de marzo a la medianoche culminará el plazo de 12 meses dado por el Gobierno del presidente venezolano, Hugo Chávez, a las empresas de pesca de arrastre para que se adaptaran a las nuevas disposiciones en la materia contempladas en la Ley del sector.

La pesca de arrastre "acaba con la flora, el plancton, el fondo marino y el 70 u 80 por ciento de la captura se pierde. Da lástima ver cómo se mueren en la cubierta del barco millones de peces y van apartando los camarones, que son para la exportación", dijo Chávez al celebrar el fin de esa práctica, informó la estatal Agencia Bolivariana de Noticias (ABN).

Según datos oficiales, el 70 por ciento de la producción nacional de pescado proviene de la pesca artesanal, un 25 por ciento de la pesca industrial, incluido el 6 por ciento que tiene la pesca de arrastre, y 5 por ciento de la acuicultura.

Por su parte, el ministro Jaua anunció que en coincidencia con el fin de la pesca de arrastre en Venezuela, el próximo 14 de marzo la Empresa Mixta Pesquera del Alba activará sus dos primeras embarcaciones de mediana escala.

Esas embarcaciones "están en proceso de adquisición internacional, son buques de gran calada, uno atunero y otro jurelero", agregó Jaua, según la agencia estatal de información.

La empresa pesquera del ALBA, creada entre Venezuela y Cuba a raíz de los acuerdos de la Alternativa Bolivariana para las Américas (ALBA), cuenta con 51 por ciento del accionariado en manos de Corporación Venezolana Agraria, mientras que el 49 por ciento restante está en poder de la cubana Pescavante.

El ALBA es una iniciativa de integración promovida por Venezuela, integrada por ese país, Bolivia, Cuba, Dominica y Nicaragua, y que surgió en contraposición al Área de Libre Comercio (ALCA) impulsada por Estados Unidos.