Kaká pide parar y Mourinho cambia su discurso

Kaká, futbolista brasileño del Real Madrid, ha pedido parar porque no se siente bien físicamente, y el técnico del equipo, José Mourinho, ha modificado su habitual discurso optimista sobre el jugador y ha traspasado la responsabilidad al departamento médico del club.

Desde que reapareció tras superar una grave lesión de rodilla, Kaká no se siente el mismo. Su última dolencia, que ya le impidió jugar el jueves frente al Málaga y por la que ha solicitado no ir convocado ante el Racing de Santander, es una "sobrecarga de la cintilla músculo ilio-tibial", según el parte médico que ha hecho público el Ral Madrid.

La dolencia de Kaká es un síndrome que le provoca dolor en la parte externa de la rodilla.

Mourinho ha pasado de un discurso tranquilo y de confianza en Kaká, a ceder a los médicos del club la responsabilidad de dar explicaciones por el momento que vive el futbolista brasileño. "No soy yo quien tengo que contar nada. Es una cosa de Kaká y el departamento médico", aseguró.

Hace tan solo tres días pidió paciencia. "La lesión fueron seis meses, pero lleva un año y seis meses sin ser él, jugando con molestias. Kaká sufre desde hace mucho y la situación no es fácil para un jugador que vive de su talento, explosividad y velocidad", destacó.

"No esperaba que regresase haciendo las cosas increíbles que le llevaron al Balón de Oro en el Milán. Está en un proceso difícil. Intenta dar lo mejor y hay que continuar apoyándole, dándole oportunidades para mejorar porque es un jugador fantástico", añadió.

Hoy, Mourinho fue más tajante al hablar de Kaká. Ante la baja de Cristiano Ronaldo para los dos próximos partidos ligueros, la presencia del brasileño era importante en el ataque madridista. El técnico portugués analizó la nueva situación.

"A mí sólo me llega la información por parte del jugador, que tiene un pequeño dolor que le limita movimientos y agilidad, que no se siente feliz porque no está al máximo", desveló.

"Entre él y el departamento médico ven lo mejor para su autoestima y confianza. Que vuelva cuando esté convencido de que está absolutamente bien. Yo lo prefiero así porque no es positivo ni para él ni para el equipo que no sienta que está al máximo. Por eso no le convoco y estoy de acuerdo con su decisión", sentenció.