Arreglos a radar evitó que Etesa diera la alerta

Las labores de mantenimiento en el radar que detecta la llegada de vientos huracanados, supervisado por la Empresa de Transmisión Eléctrica S.A. (Etesa), impidió que se emitiera una alerta preventiva el lunes pasado.

Dicho radar se ubica en la Zona del Canal y, previo a la tormenta, Etesa desconocía el estado del equipo, informó el meteorólogo de la Institución, César Osorio.

Explicó que en el país solo existe un artefacto de este tipo, pero se gestionan dos más para ser ubicados cerca de la frontera con Colombia y otro en Chiriquí a mediados del próximo año, para evitar quedar sin la herramienta en momentos claves.

“Obtenemos datos de la presión atmosférica, y hacemos evaluaciones generales con el radar cada seis horas, así, pronosticamos los eventos que surgen en cada lugar”, detalló Osorio.

Mencionó que debe mejorarse la comunicación, ya que hubo casos en los que fue casi imposible dirigirse al público a través de las emisoras de radio u otros medios de comunicación.

Arturo Alvarado, director del Sistema de Protección Civil (Sinaproc), mencionó que los vientos huracanados registrados el pasado lunes fueron inesperados y agregó que obtuvieron reportes del fenómeno, 12 minutos antes del suceso.

Reporte del Sinaproc

Hasta las tres de la tarde de ayer, un informe preliminar del Sinaproc señalaba que el lunes se atendieron 79 emergencias.

De estas, unas 69 correspondían a caídas de árboles, cinco a desprendimientos de techo, dos por deslizamientos, dos casas afectadas producto de inundaciones, dos por caídas de tendidos eléctricos y el colapso de un puente, este último en la comunidad de Cermeño, en Capira.

En corregimientos de la capital como Ancón y Las Mañanitas, el Sinaproc atendió tres cortes de árbol en cada sector, y otros tres en el distrito de Arraiján.

En cuanto a las inundaciones, el Sinaproc mencionó que en Nuevo Tocumen y en el sector 5 de la 24 de Diciembre, dos casas fueron afectadas. A su vez, se produjo un deslizamiento de tierra en El Tecal y la caída de un tendido eléctrico en Burunga, ambas situaciones en Arraiján.

En tanto, las clases en cinco escuelas del corregimiento de Cermeño, distrito de Capira, fueron suspendidas ayer, producto del colapso del puente vehicular que comunica a la región.

La empresa Excavaciones del Istmo ha trabajado en la habilitación de un vado sobre el río Capira, el cual se calcula que podría estar listo en dos días.

Heriberto Chávez, encargado de rescate del Sinaproc, dijo que fue necesario mantener personal en el área para sacar los restos del puente caído.

Debido al colapso del puente, 13 poblaciones de Cermeño han resultado afectadas.