Observaciones al proyecto de ampliación de la ACP
Publicado 2006/03/19 00:00:00
- Delfia Cortéz
La Autoridad del Canal de Panamá (ACP), publicó el lunes 13 de marzo un escrito especial para el Panamá América, lo que considero una explicación bien interesante sobre algunos aspectos del "Proyecto de Ampliación", que tituló : Mitos y realidades del Canal de Panamá. Después de su lectura, concluí que el contenido de la información es verás en un alto porcentaje, pero no así cuando expresa que hay que apurarse "antes que nos roben el mandado", ya que se recurre a un argumento irreal y de emergencia o premura artificial. Por otra parte, se insiste en el vicio de evitar mencionar el costo total de la obra, actitud de la ACP crónica que mas bien multiplica sospechas en la comunidad, toda vez que nadie con un promedio de inteligencia normal, puede creer que a estas alturas después de seis años de estudios e inversión por $ 40 millones, estas cifras no estén ya sobre el despacho del Presidente de la República. Sin embargo, los señores de la ACP en otras ocasiones han mencionado una cifra caprichosa e imposible de aceptar, o "cifra gancho" de $ 5 mil millones para no preocupar a la población y atraerla sumisa al Referéndum. De lograr aprobar con cifras falsas el Referéndum, ya con la zanja abierta y los trabajos en plena ejecución, entonces sería en ese momento que la ACP informaría al pueblo las cifras reales del costo de la obra. ¡De ser así, en esos momentos críticos ¿quién podría ordenar suspender el ensanche? ¡Nadie! Aunque debemos aceptar y así lo creo, que las palabras del Presidente, son sinceras y cargadas de esperanzas, ¡nadie¡ puede garantizar hoy, que no vamos a necesitar recurrir a la anualidad del pueblo de unos $ 400 millones y paralizar el desarrollo nacional quizás por 25 o 30 años, hasta terminar de pagar el tercer juego de esclusas. De igual manera, las declaraciones del Presidente, se debilitan mientras siga vigente la Ley 44. En el mismo orden, el administrador de la ACP, Ing. Alemán Zubieta ha declarado, que las navieras pagarían el costo total de la obra, aplicándole una sobre tasa a los peajes. Se trata de otro "argumento gancho"para atraer a la población y el "Sí" hasta pasar el Referéndum. Si esta medida de sobre gravar a las naves se implementa, la mayoría de los barcos buscarían la alternativa del Canal de Suez y el Multimodal de California. Suez podría declararse en "baratillo de peajes", debido a que ya se ha pagado mas de diez veces desde que se inauguró en el año 1869 y nosotros en desventaja comparativa iniciando cuesta arriba con el peso de la deuda en nuestras espaldas. Estaríamos los panameños, ¡matando nuestra gallina de los huevos de oro! Finalmente, es la primera vez que la ACP expresa públicamente las razones de fondo por su prisa para construir las esclusas "Post-Panamax" y lo dejan ver mas o menos así: Panamá es dueña del "Atajo Estratégico" y tiene la llave para definir el tamaño de los barcos a futuro, tal como sucedió con la generación de los "Panamax" que iniciaron su construcción a partir de 1914, tomando su tamaño y dimensiones, específicamente para poder transitar por el Canal de Panamá, de allí su nombre "Panamax". Nuestros paisanos que dirigen la ACP, jóvenes aun y deslumbrados por el "Síndrome de Lesseps"; y oportunidad de enriquecimiento para algunos, se empecinan en construir las esclusas "Post-Panamax", con la visión de que operadores de carga, armadores y astilleros, prioricen la construcción de barcos mayores a los "Panamax". Vale agregar en este punto dos realidades, primero que mientras Panamá dueña del Atajo no lo ensanche, el negocio seguirá prospero por muchos años, ya que se seguirán construyendo nuevos Panamax y cruzando por el Canal, sin necesidad de hipotecarnos y a cambio utilizar casi mil millones de dólares anuales (como país de primer mundo) y sin incrementar mas bien aliviar la deuda externa, en un "Gran Programa Nacional para el Desarrollo" a largo plazo. La segunda realidad que aflora, consiste en que la prioridad o apuro por construir las esclusas "Post-Panamax, no obedece al interés nacional, sino mas bien al grupo de profesionales que administran el Canal, empresarios y políticos que están concentrados en las próximas elecciones. Ahora bien, mirar hacía el futuro con luces largas como lo hace la ACP es correcto, sin embargo, desconsideradamente costoso y despiadado para un pueblo subdesarrollado y con tantas necesidades, quien terminaría pagando la obra con sus ahorros y sacrificio de su desarrollo y bienestar. En consecuencia, esta es la definición a sugerir y es la que debe debatirse en el Referéndum, ¡que paguen con donaciones los países con fuertes economías navieras! como los EE.UU. Japón, China, Korea, Unión Europea, etc. y si estos no demuestran interés en aportar y compartir los riesgos junto a los panameños, es porque la construcción del tercer juego de esclusas "Post-Panamax", para el mundo naviero aún no es una verdadera prioridad. Lo prudente y recomendable entonces, sería esperar mientras nos desarrollamos sin necesidad de empréstitos con los ingresos derivados actualmente del Canal.
Por lo que se comenta, parece que el resultado de los estudios está por hacerse público. Esto dará la oportunidad de constatar la complejidad de un trabajo que se ha manejado, por razones obvias, de forma discreta. Será entonces cuando todos los que opinamos a favor o en contra, tendremos todo el material para confrontar nuestros argumentos. Lo que el país espera es que se analice con cuidado y sin prejuicios. Al ciudadano deberá informársele honestamente.
Anticipando que el proyecto será aprobado, pienso que el país debe comenzar a prepararse para participar activamente de la obra y obtener la mayor ventaja posible desde su inicio. Esta es una clara responsabilidad del Gobierno Nacional. La legión de profesionales y trabajadores especializados que se necesitará es grande. Un inventario de su disponibilidad es tema urgente. Llenar el vacío que indudablemente tenemos, aún más urgente. Debemos enfrentar esta obra sin complejos. Nuestra capacidad de manejar exitosamente un emprendimiento de esta magnitud se demuestra todos los días en el Canal, hoy administrado y operado 100% por panameños.
Indicó que no sólo los niños pueden estudiar esta profesión, aquí lo importante es el interés que desempeñe la persona. Por esto, en México tenemos a personas de hasta 60 años de edad, que no sólo tocan violín, sino viola y contrabajo.
Por lo que se comenta, parece que el resultado de los estudios está por hacerse público. Esto dará la oportunidad de constatar la complejidad de un trabajo que se ha manejado, por razones obvias, de forma discreta. Será entonces cuando todos los que opinamos a favor o en contra, tendremos todo el material para confrontar nuestros argumentos. Lo que el país espera es que se analice con cuidado y sin prejuicios. Al ciudadano deberá informársele honestamente.
Anticipando que el proyecto será aprobado, pienso que el país debe comenzar a prepararse para participar activamente de la obra y obtener la mayor ventaja posible desde su inicio. Esta es una clara responsabilidad del Gobierno Nacional. La legión de profesionales y trabajadores especializados que se necesitará es grande. Un inventario de su disponibilidad es tema urgente. Llenar el vacío que indudablemente tenemos, aún más urgente. Debemos enfrentar esta obra sin complejos. Nuestra capacidad de manejar exitosamente un emprendimiento de esta magnitud se demuestra todos los días en el Canal, hoy administrado y operado 100% por panameños.
Indicó que no sólo los niños pueden estudiar esta profesión, aquí lo importante es el interés que desempeñe la persona. Por esto, en México tenemos a personas de hasta 60 años de edad, que no sólo tocan violín, sino viola y contrabajo.
Para comentar debes registrarte y completar los datos generales.