PanamaEmprende no llena expectativas

Cuando se dio el lanzamiento del Programa PanamaEmprende, cuyo propósito es agilizar el proceso de apertura de empresas, los funcionarios encargados del proyecto pronosticaban que la calificación de Panamá como destino para hacer negocios iba a mejorar.

Sin embargo, con la publicación del último informe del Banco Mundial titulado "Doing Business", que mide el clima de negocios en 181 países, vemos que Panamá descendió 5 puestos. En el renglón relacionado con la apertura de empresas, Panamá mejoró tres puestos, de 35 a 32. Cuando se lanzó PanamaEmprende, se vendió la idea que Panamá iba a estar entre los países líderes en la facilidad de la apertura de empresas, pero el informe muestra lo contrario.

Lo que sí demuestra ese informe es que Panamá tiene serios problemas estructurales que debe arreglar para tener una economía moderna y competitiva. Nuestra legislación laboral data de más de 35 años cuando las realidades económicas eran diferentes y vivíamos en una economía cerrada. Hoy día estamos inmersos en la globalización, pero el Código de Trabajo no contempla conceptos como productividad ni flexibilidad en la contratación, lo que se traduce en menos empleos formales y más empleos en el sector informal.

Carecemos de legislación moderna que proteja al inversionista o dueño minoritario. Hemos visto escándalos en Panamá donde los pequeños inversionistas y depositantes han perdido todo, y los directivos y dueños de las empresas no les pasa nada. Si comparamos esto al escándalo de Enron en Estados Unidos, vemos que en ese país sí son castigados los directivos de las empresas que cometen irregularidades.

Nuestro sistema judicial también refleja serías deficiencias, según el informe del Banco Mundial. Los criterios usados demuestran que lograr hacer cumplir un contrato en Panamá demora demasiado tiempo y es costoso por las ineficiencias de la justicia panameña.

Nuestro complicado y costoso sistema tributario también refleja serias deficiencias. Panamá está calificado 172 de 181 países en este indicador, igual cifra que refleja el indicador de legislación laboral. La reforma fiscal que aprobó el gobierno en el 2005 es calificada como un éxito por sus representantes, pero el informe "Doing Business" refleja que en Panamá los impuestos son altos y que el pago del mismo es un proceso complicado. Esto le resta competitividad a las empresas panameñas y ahuyenta a los inversionistas extranjeros.

A pesar de nuestro alto crecimiento económico, tenemos mucho que mejorar en Panamá para poder lograr tener una economía moderna y eficiente. Tenemos que simplificar la legislación tributaria, bajar los impuestos y debemos ver los ejemplos de países como Irlanda, Estonia y Rusia que implementaron un "flat tax" y lograron no sólo simplificar el proceso de tributar, sino que aumentaron los ingresos tributarios, a pesar de que bajaron la tasa impositiva. Reformemos el sistema judicial para garantizar la seguridad jurídica y lograr que el sistema sea rápido, eficiente y justo para todos. Con estos pasos lograremos modernizar nuestra economía.