¿Prefieres ser termómetro o termostato?

Estos dos dispositivos tienen una función muy parecida, pero al final son muy diferentes; también tienen una enseñanza para la vida.
Ambos dispositivos miden la temperatura; el termómetro se utiliza en múltiples disciplinas y brinda información útil, pero solo es información; el termómetro en sí no hace más nada.

El termostato, a diferencia, es un elemento activo; este toma control de la situación y dicta cuando debe aplicarse más o menos trabajo para mantener la temperatura de las cosas. El aire acondicionado, la nevera de tu casa, el calentador de agua, la secadora; todos estos aparatos son gobernados por un termostato para poder operar adecuadamente. Esta misma analogía se aplica a las personas; están aquellos que solo ven las cosas ocurrir y no toman ningún tipo de acción y por el otro lado, están las personas proactivas que van midiendo constantemente la ‘temperatura’ de sus vidas y aplican los cambios necesarios para su correcto desempeño.

A mí en lo personal me duele mucho escuchar a las personas, especialmente a la gente joven, quejarse: “la vida está muy cara”, “no hay trabajo”, “el Gobierno tiene la culpa”, “yo no sirvo para eso” y muchas otras quejas que se dan todos los días; estos personajes son ‘termómetros’; ellos solo ven las cosas, dan su punto de vista, pero no mueven un ápice para tratar de que la situación cambie.

El individuo con características de ‘termostato’, por el contrario, siempre trata de ver más allá del día de hoy, y en vez de quejarse por la situación que le agobia, busca la manera de superar lo que tenga para salir adelante; si la vida se le hace más cara, busca la forma de aumentar su ingreso; para poder conseguir un trabajo, se preparó durante toda su vida y actualmente se sigue preparando para poder entrar en el mercado laboral y poder hacerse un nombre de prestigio que le sirva a subir los escalones del éxito profesional; el ‘termostato’ no espera que sea el Gobierno, o el vecino, o alguna institución benéfica que le resuelva su situación; el ‘termostato’ va ajustando la temperatura de su vida a los ambientes que tenga por delante y toma el control de su situación.

Hoy te invito a que te hagas un autoanálisis y veas en tu conciencia si te comportas como un termómetro, pasivo y solo viendo las cosas pasar; o por el contrario, te pareces más al termostato y tomas el control de cada una de las situaciones de tu vida. El termostato tiende a tener siempre una actitud guerrera y está dispuesto a ‘sudar la camiseta’ en por de llegar a superarse y ser un ganador; entonces, ¿qué prefieres ser?

Colaborador.