Resoluciones de duelo
- REDACCION
Estamos de acuerdo con que a personas meritorias se les rinda tributo tras su fallecimiento y con que distintas organizaciones dicten resoluciones a ser leídas al final de los oficios religiosos haciendo resaltar las acrisoladas y ejemplares virtudes que las distinguieron durante sus vidas. No obstante, consideramos que cuando hay número plural de ellas, no se lean más de dos o tres y que se mencione solamente los nombres del resto con el anuncio de que se las entregarán a los deudos, y, en efecto, pasar a entregárselas.
No nos parece justo que tras una hora de misa se mantenga cautivos a los dolientes familiares de la persona fallecida y al resto de la concurrencia, cuyos integrantes, por respeto y consideración, se mantienen presentes en los templos hasta el final de todas las lecturas. Quizá la mejor solución sería la de consultar previamente a los propios familiares.
Aprovechamos la oportunidad para recomendar que en esos documentos no se diga que se resuelve lamentar, sino que se resuelve expresar que se lamenta la desaparición.
Para comentar debes registrarte y completar los datos generales.