Skip to main content
Trending
Disrupción digital debe tener impacto social en la educación y finanzasLa columna de Doña PerlaCelebración patronal en Chitré sigue adelante pese a la crisis hídricaEn el muelle de Chiquita Panamá los estibadores, sin carga que mover, están a la esperaOrdenan el cierre temporal del vertedero de Macaracas
Trending
Disrupción digital debe tener impacto social en la educación y finanzasLa columna de Doña PerlaCelebración patronal en Chitré sigue adelante pese a la crisis hídricaEn el muelle de Chiquita Panamá los estibadores, sin carga que mover, están a la esperaOrdenan el cierre temporal del vertedero de Macaracas
  • Actualidad
    • Política
    • Sociedad
    • Judicial
    • Provincias
    • Mundo
    • Aldea Global
    • Sucesos
  • Opinión
    • Columnistas
    • Confabulario
    • El Pulso
    • Trazo del día
    • Doña Perla
  • Economía
  • Variedades
  • Deportes
  • Tecnología
  • Multimedia
    • Videos
    • Podcast
    • Galerías
  • Especiales
  • e-PAPER
  • Contenido Premium
  • Recetas
  • Cine
Panamá América Panamá América
Inicio

Opinión / www.librecomercio.com

1
Panamá América Panamá América Miercoles 18 de Junio de 2025
  • Secciones
  • Actualidad
  • Opinión
  • Economìa
  • Variedades
  • Deportes
  • Tecnología
  • Multimedia
  • videos
  • premium
  • e-papper
  • mis noticias
  • x
  • Mi cuenta
  • Mi perfil
  • Mis Noticias
  • Prémiate
  • Mis boletines
  • Seguridad
  • x
  • Notificaciones
  • videos
  • premium
  • e-papper
  • mis noticias

www.librecomercio.com

Publicado 2000/07/25 23:00:00
  • Rafael Carles
  • facebook messenger
  • Compartir en WhatsApp
  • x twitter
  • facebook messenger
  • facebook messenger

Hace veinte años, el futurólogo norteamericano Alvin Toffler pronosticó el paso de la economía mundial a una "tercera ola" globalizante y tecnoindustrial. A la tercera ola, en la tesis de Toffler, había precedido la "primera ola" del trabajo agrícola y la "segunda ola" de la revolución industrial de chimeneas, fundidoras y abundante trabajo proletario. Cuando le preguntaron a Toffler que deberían hacer las naciones del tercermundistas para pasar de la primera a la tercera ola, su respuesta fue concisa: "Alimentar y educar". ¡Que interesante! ¡Qué profético! La ironía es que en Panamá por décadas, e incluso aún todavía, nos encaprichamos en seguir promoviendo políticas económicas que oscilan entre la primera y la segunda ola, y la pesada perseverancia por mantenernos entre éstas nos ha costado notables retrasos y crisis recurrentes.
El capitalismo global es el marco de referencia de nuestra época. La globalización es un proceso histórico por el cual las ineficiencias económicas nacionales ceden espacio en beneficio de las ventajas competitivas internacionales, y esta "tercera ola" contempla este fenómeno como una realidad indiscutible. Los partidarios de esta "tercera ola" pretenden darle sentido práctico al libre comercio para que sea más equitativo, con el objeto también que conduzca a las naciones a una mejor distribución de la riqueza y no ponga en riesgo el concepto mismo de democracia.
Irlanda es un ejemplo excepcional del paso de la primera a la tercera ola sin haberse detenido, sino de volandas, en la segunda. En 1940, la economía irlandesa era esencialmente rural. La agricultura empleaba a la mitad de la fuerza de trabajo, y las tres quintas partes de la población vivían en el campo. Hoy, las tres cuartas partes de los irlandeses viven en ciudades y sólo el 10 por ciento se ocupa en tareas del campo. El 93 por ciento de la fuerza de trabajo está integrada a los servicios (el 63 por ciento) y a la industria (el 30 por ciento).
En 1949, los principales rubros de la industria eran la cerveza, la harina, la impresión, la vestimenta y el azúcar, dando cuenta del 40 por ciento de la producción. La industria electrónica no existía. La química representaba apenas el uno por ciento de la producción industrial. En la actualidad, los sectores mayores de la industria son, precisamente, las computadoras y la farmacéutica. Los servicios dominan las dos terceras partes del empleo y del ingreso irlandeses en tanto que la agricultura, gracias a mayores inversiones con menor ocupación, ha aumentado la producción de un valor de 220 millones de dólares en 1949 a 6,800 millones de dólares en 1998. En el mismo lapso de tiempo, el salario real de los trabajadores - su poder adquisitivo - se ha multiplicado por tres.
La expansión de las exportaciones ha sido quizás el cambio más llamativo y el resultado más positivo de este espectacular salto de la primera a la tercera ola. En 1949, Irlanda era exportadora agrícola y el 91 por ciento del producto iba a la Gran Bretaña. Algunas importaciones, ese mismo año, rayaban en lo gracioso: diez mil aspiradoras, veinticinco mil abrigos de segunda mano. Hoy, Irlanda cuenta con un excedente de exportaciones. Sólo un 30 por ciento van a Inglaterra. La diversificación de exportaciones es un hecho. La agricultura ahora representa sólo el cuatro por ciento de las exportaciones. La producción industrial, la farmacéutica, la electromecánica y los componentes técnicos son las exportaciones mayoritarias, encabezadas por las computadoras: el 23 por ciento de la exportación. La balanza de pago ha pasado del déficit al superávit. La economía genera 140 mil millones de dólares al año.
La población de cuatro millones de habitantes tiene un ingreso per cápita de 23,000 dólares anuales (contra tres mil en Panamá, cinco mil en Brasil y siete mil en Argentina). El crecimiento anual es de cerca del ocho por ciento.
Y todo esto, para que el lector pueda comparar aún más, en un país que en 1848 sufrió una hambruna que mató a un millón de irlandeses y lanzó a la emigración a otro millón. Todo esto en un país que debió luchar con esfuerzo, valor e intrepidez para obtener, apenas en 1921, su independencia de la Gran Bretaña y cuyo territorio continúa amputado por Irlanda del Norte, origen de tensiones políticas que el gobierno de Dublín se ha esforzado, con gran imaginación diplomática, por encauzar negociadamente y sin interrumpir el espectacular desarrollo de la República de Irlanda.
¿Cuál ha sido la base del gran salto irlandés? Fred Webster, profesor de economía de la Universidad de Darthmouth y autor del libro "Market Driven Management", lo atribuye a los sucesivos pasos de integración económica iniciados con la entrada a la Comunidad Económica Europea en 1973 y culminado con la supresión de barreras y tarifas en 1993. Las medidas de libre comercio pasaron, admite el gurú en economía internacional, por una etapa de maquiladoras y aprovechamiento de la mano de obra barata de Irlanda. Pero el resultado, dos décadas más tarde, es una Irlanda no sólo más próspera, sino más independiente que antes. El 84 por ciento de las empresas son de nacionalidad irlandesa.
La presidenta de Irlanda, Mary McAlesse, una mujer hermosa, esbelta y activa, como su país, añade otro factor fundamental: la inversión irlandesa en educación ha sido masiva y prioritaria. De 1940, cuando las escuelas nacionales se encontraban bajo control eclesiástico, a la Ley de Educación Libre de 1967 a la Ley de Educación Obligatoria hasta los quince años, Irlanda se ha dado una base educativa que hoy abarca a un millón de estudiantes y que ha sido el motor del conocimiento para la producción y de la producción para el crecimiento y el bienestar.
El "tigre celta" no carece, como toda economía desarrollada, de desequilibrios e injusticias, de rezagos y asignaturas pendientes. Pero la base para una creciente prosperidad parece hoy algo adquirido. Irlanda, además, retiene su espectacular belleza física en los extremos del verdor lluvioso de sus valles y el azul agitado de sus mares, pero también hay una belleza agreste en sus espectaculares montañas de piedra caliza, en sus turbas, ciénagas y lajas. Y añado con la mayor sencillez: pocas personas he conocido de mayor calidez humana como los irlandeses.
Me alegra que nos encontremos aquí con un claro ejemplo de una especie de transformación mundial, que consiste en asumir el modelo de crecimiento económico y el incremento de la productividad como planteamiento económico serio, desentendiéndose de las consecuencias políticas de éste, pero claro está, en el entendimiento tácito de que será respaldado cuando genere bienestar. Y aunque la globalización mantiene una larga lista de críticos que aducen que ésta conduce al mundo a una gigantesca desigualdad y a una concentración del poder económico, no podemos hacernos los circunspectos en torno al milagro de Irlanda, que nos ha dejado una ventana abierta para que contemplemos los beneficios que se pueden lograr cuando se implementan políticas de libre comercio.
Google noticias Panamá América

Para comentar debes registrarte y completar los datos generales.

Clasiguía
Clasiguía

Contenido Patrocinado

Empresas enfrentan el desafío de proteger su operación digital ante ciberamenazas y fallos tecnológicos

Transforman ideas en negocios sostenibles en Donoso

Clientes de Caja de Ahorros se beneficiarán de pagos digitales con Yappy

¡Los nuevos Galaxy A56, A26 y A36 ya están en Panamá!

El juego cambia: Betcris se suma a la FPF para impulsar la pasión por el fútbol en Panamá

Últimas noticias

El impacto de la tecnología en las actividades productivas es considerada como una revolución digital que ha impactado a las empresas. Foto ilustrativa

Disrupción digital debe tener impacto social en la educación y finanzas

Chollykid. Foto: Instagram

La columna de Doña Perla

El sábado 21 se celebrará el desfile de carretas y danzas por las calles de Chitré, celebración en la que se espera la participación de empresas locales y reinas de festividades del área. Foto. Thays Domínguez

Celebración patronal en Chitré sigue adelante pese a la crisis hídrica

Un hombre camina frente a contenedores de la empresa bananera Chiquita este martes, en Puerto Almirante (Panamá). EFE/ Bienvenido Velasco

En el muelle de Chiquita Panamá los estibadores, sin carga que mover, están a la espera

Entre los trabajos sugeridos están el control de los olores, lixiviados y construcción de cerca perimetral o barrera natural, y la eliminación de basura en las inmediaciones de la quebrada El Colmón. Foto. Archivo

Ordenan el cierre temporal del vertedero de Macaracas




Panamá América
  • Siguenos en:
  • videos
  • premium
  • e-papper
  • mis noticias
Buscar
Mapa del sitio
Clasificados
Publicidad
Grupo EPASA
Crítica
Día a Día
Mujer
Cine
Recetas
Impresos

Miembro de:

Miembro del PAL
Sociedad de prensa
Grupo EPASA

Todos los derechos reservados Editora Panamá América S.A. - Ciudad de Panamá - Panamá 2025.

Prohibida su reproducción total o parcial, sin autorización escrita de su titular.

Utilizamos cookies propias y de terceros para mejorar nuestros servicios y mostrarle publicidad relacionada con sus preferencias mediante el análisis de sus hábitos de navegación. Si continua navegando, consideramos que acepta su uso. Puede cambiar la configuración u obtener más información "aquí".