Los sueños se desvanecen en el distrito de Chiriquí Grande
Publicado 2007/06/21 23:00:00
- Itsel Miranda Jordán
Los pobladores se encuentran sumidos en la pobreza y a la espera de mejores días.
Con triste pesar, Cipriano Ayarza ve cómo sus sueños se desvanecen. Aún recuerda aquellos tiempos en que junto a su esposa vendía diversos productos en el muelle Chiriquí Grande.
Según Ayarza, todos los días llegaba gran cantidad de embarcaciones que se dedicaban a transportar a las personas que acudían, desde distintos puntos de la provincia, a este sitio, en donde se comercializaban muchos productos.
Aclaró que los ingresos económicos eran grandes y la extrema pobreza no existía, pues la mayoría de los pobladores trabajaban en el ferry y vendiendo alimentos.
Ayarza alegó que todo comenzó a cambiar desde que se construyó la carretera Rambala- Almirante, hace diez años, ya que se acabó el movimiento de personas y, por tanto, el económico en este distrito, que actualmente se ha convertido en un pueblo que lucha para poder sobrevivir.
"Lo que es bueno para unos, a otros nos afecta, ya que nuestra economía dependía de la llegada de las lanchas y el ferry; ahora estamos pasándola mal", dijo.
Aseveró que con la triste decadencia del muelle, no les quedó de otra que dedicarse a la pesca y a la agricultura; sin embargo, ahora surgió un nuevo problema, puesto que con el derrame de petróleo en la bahía, no pueden pescar.
Un pequeño comerciante, que pidió reserva de su nombre, señaló que es dura la situación por la que atraviesan.
Alegó que se dedica a la venta de diversos productos, pero solamente durante el inicio de la época escolar, es que puede percibir un dinero extra.
Mencionó que muchos maestros acuden a comprar útiles y víveres.
"Tengo tres hijos que dependen de mí. Antes de que se abriera la carretera era más fácil, porque obligatoriamente las personas tenían que llegar a este lugar y muchos compraban ropa, comida y hasta utilizaban los hoteles; sin embargo, ya no es así", admitió.
En tanto, Danilo Castillo, quien tiene años de vivir en Chiriquí Grande, manifestó que ha sobrevivido por obra y gracia de Dios.
Expresó que su humilde negocio está al borde de la ruina, porque la venta no es nada buena.
Aclaró que el único día que puede cocinar una buena comida en su casa son los domingos, ya que los educadores llegan al puerto, y siempre terminan comprándole algo.
"Por lo general, los domingos es que los moradores de las comunidades costeras vienen a comprar sus alimentos", dijo.
A pesar de su baja economía y los problemas sociales que atraviesa este distrito, cuenta con un puesto de salud, Dirección Regional del Ministerio de Educación, una subestación de Policía, una sucursal del Banco Nacional, una oficina del Ministerio Público y un municipio. En este lugar también se ubica la empresa Petroterminales Panamá S.A., que es una de las más importantes de la región.
Las autoridades del distrito alegaron que se contempla la ejecución de varios proyectos, con el fin de mejorar la precaria situación que se registra.
Ezequiel Gracia, representante del corregimiento, también llamado Chiriquí Grande, manifestó que con la implementación de los proyectos se generará mejores ingresos económicos.
Agregó que es lamentable que no se haya tomado en cuenta esta región del país para un proyecto turístico, a pesar de que cuenta con grandes e interesantes atractivos, que permitirían un nuevo auge comercial.
Según Ayarza, todos los días llegaba gran cantidad de embarcaciones que se dedicaban a transportar a las personas que acudían, desde distintos puntos de la provincia, a este sitio, en donde se comercializaban muchos productos.
Aclaró que los ingresos económicos eran grandes y la extrema pobreza no existía, pues la mayoría de los pobladores trabajaban en el ferry y vendiendo alimentos.
Ayarza alegó que todo comenzó a cambiar desde que se construyó la carretera Rambala- Almirante, hace diez años, ya que se acabó el movimiento de personas y, por tanto, el económico en este distrito, que actualmente se ha convertido en un pueblo que lucha para poder sobrevivir.
"Lo que es bueno para unos, a otros nos afecta, ya que nuestra economía dependía de la llegada de las lanchas y el ferry; ahora estamos pasándola mal", dijo.
Aseveró que con la triste decadencia del muelle, no les quedó de otra que dedicarse a la pesca y a la agricultura; sin embargo, ahora surgió un nuevo problema, puesto que con el derrame de petróleo en la bahía, no pueden pescar.
Un pequeño comerciante, que pidió reserva de su nombre, señaló que es dura la situación por la que atraviesan.
Alegó que se dedica a la venta de diversos productos, pero solamente durante el inicio de la época escolar, es que puede percibir un dinero extra.
Mencionó que muchos maestros acuden a comprar útiles y víveres.
"Tengo tres hijos que dependen de mí. Antes de que se abriera la carretera era más fácil, porque obligatoriamente las personas tenían que llegar a este lugar y muchos compraban ropa, comida y hasta utilizaban los hoteles; sin embargo, ya no es así", admitió.
En tanto, Danilo Castillo, quien tiene años de vivir en Chiriquí Grande, manifestó que ha sobrevivido por obra y gracia de Dios.
Expresó que su humilde negocio está al borde de la ruina, porque la venta no es nada buena.
Aclaró que el único día que puede cocinar una buena comida en su casa son los domingos, ya que los educadores llegan al puerto, y siempre terminan comprándole algo.
"Por lo general, los domingos es que los moradores de las comunidades costeras vienen a comprar sus alimentos", dijo.
A pesar de su baja economía y los problemas sociales que atraviesa este distrito, cuenta con un puesto de salud, Dirección Regional del Ministerio de Educación, una subestación de Policía, una sucursal del Banco Nacional, una oficina del Ministerio Público y un municipio. En este lugar también se ubica la empresa Petroterminales Panamá S.A., que es una de las más importantes de la región.
Las autoridades del distrito alegaron que se contempla la ejecución de varios proyectos, con el fin de mejorar la precaria situación que se registra.
Ezequiel Gracia, representante del corregimiento, también llamado Chiriquí Grande, manifestó que con la implementación de los proyectos se generará mejores ingresos económicos.
Agregó que es lamentable que no se haya tomado en cuenta esta región del país para un proyecto turístico, a pesar de que cuenta con grandes e interesantes atractivos, que permitirían un nuevo auge comercial.
Para comentar debes registrarte y completar los datos generales.