Acuerdo del Gobierno y Finmeccanica, usado en defensa de Mulino

La defensa del exministro de Seguridad, José Raúl Mulino, está en espera de que se le haga entrega de la copia del acuerdo entre Panamá y la empresa italiana Finmeccanica, para ser usado como prueba en el proceso que se le sigue al exfuncionario.

Hasta el día de ayer, luego de haber pasado 24 horas desde que se anunció la firma del acuerdo, en un acto en la presidencia de la República, la defensa del exministro Mulino no había recibido el contenido de dicho documento.

A través de Twitter, el embajador de Panamá en Italia prometió que el documento se haría público.

José Raúl Mulino Cohen, hijo del exministro, destacó que este acuerdo evidencia que no hubo corrupción en las actuaciones de su padre y es prueba suficiente para que sea liberado.

"No creo que este gobierno vaya a negociar con delincuentes", expresó Mulino, en reacción al acuerdo al que llegó Berguido con la estatal empresa italiana Finmeccanica.

El propio embajador reconoció que no se encontraron evidencias de que hubo pago de coimas y que la empresa cumplió con sus obligaciones estipuladas en el contrato, por tal motivo se tuvo que negociar o, de lo contrario, iba a ser más costoso para el país si el proceso se iba al arbitraje.

Doble juzgamiento

Berguido, en su entrevista a medios televisivos, reconoció que en Panamá se hizo un proceso por el tema de los radares y hasta hubo un pronunciamiento de la Corte, archivando el expediente contra José Raúl Mulino.

Es este, uno de los incidentes más importantes que ha presentado la defensa de Mulino, que sustenta que el expediente debe anularse, porque se comete la figura del doble juzgamiento, la cual es prohibida por el ordenamiento jurídico panameño.

"Confiamos que el juzgado actúe en derecho y le otorgue la libertad a mi padre", fueron las palabras de José Raúl Mulino Cohen, hijo del exministro de seguridad del mismo nombre.

Mulino cumple hoy cuatro meses de estar detenido, lo que a juicio de su hijo es producto de una persecución política, porque a lo largo del proceso no hay nada en su contra.