Reflexión de la cólera I
Alonso Correa | [email protected] |Es complicado, la fuerza interior hace chillar las alarmas en nuestra alma, volar por los aires toda mesura y saciarse con la más primitiva acción.
Es complicado, la fuerza interior hace chillar las alarmas en nuestra alma, volar por los aires toda mesura y saciarse con la más primitiva acción.
Usamos las máscaras como un escudo, una barrera que impide que la atención exterior oxide la lustrosa armadura que vemos puesta en nosotros mismos.
Puede que envejecer sea un asunto ineludible e irreversible, pero no necesariamente negativo.
Conviene fortificar este asunto para que lo auténtico nos aliente y alimente, hasta convertirlo en un patrimonio común, que nos haga la vida más fácil entre sí.
Cada día es un incesante volver a empezar. Hay que rehacerse y renacerse. Todo es ponerse en camino y caminar.