
Sin comprensión no hay cristianismo
Monseñor Rómulo Emiliani | [email protected] |Cristo Jesús nos enseñó que su corazón es infinitamente compasivo. Que el nos reveló que su Padre es eternamente misericordioso.
Cristo Jesús nos enseñó que su corazón es infinitamente compasivo. Que el nos reveló que su Padre es eternamente misericordioso.
Las palabras son bálsamos, remedios curativos que, así como un medicamento, pueden sanar hasta la más mortífera herida.
No solo de siglos atrás, sino a nivel contemporáneo. Todos los grandes hombres según el mundo, no importa su poder o fama se mueren.
La critica debe ser, siempre lógica y coherente. Ausentar la critica de la lógica y de la coherencia propias que le son consustanciales, debilita el argumento.
Agobio. Los minutos mueren con rapidez. El tiempo se te viene encima. Ya no sabes qué hacer. Empiezas a garabatear letras sin significado.