Tecnología para llevarte a los brazos de morfeo
Vircy Duarte | [email protected] | PanamaAmericaEn el mercado, cada vez hay más recursos muy utilizados a la hora de incentivar un sueño profundo y como sonidos relajantes.
En el mercado, cada vez hay más recursos muy utilizados a la hora de incentivar un sueño profundo y como sonidos relajantes.
Únicamente de esta manera, podremos ascender con una cierta paz y sobrecogernos mutuamente, lo que supone crear una nueva mentalidad.
El lenguaje es el medio en que se comunica el ser humano desde que Dios infundió el alma en aquél ser cuyo cuerpo era el de un animal más.
Como ya he dicho, la definición de moral solo llega a comprender muy poco del infinito universo de reglas autoimpuestas con la que regimos nuestro día a día.
Hay que alzar la voz y hasta irrumpir en combate anímico contra uno mismo, eso sí como poetas en acción.
No tiene sentido vivir sin sentido, así como no tiene razón navegar sin destino, porque a la mar, así como a la vida, le gusta naufragar al navío perdido.
A esta indiferencia y ceguera se debe en parte el drama del hambre y desamparado de millones de personas.
Puede que envejecer sea un asunto ineludible e irreversible, pero no necesariamente negativo.
Richard Cooke, señala que formaban cacicazgos de una costa a la otra e intercambiaban productos que faltaban en algunos de los ambientes.
A Jesús le extrañó, que después de haber curado a diez leprosos, solo uno de ellos se devolvió para dar las gracias, y ese era un samaritano.
Eternamente flechado por Cupido, la intensidad de su quehacer fue el epígrafe de su camino a lo largo de su musical vivencia terrenal.
No hay derecho humano digno de llamarse "derecho vigente y que se cumple", sin que el particular o la persona disponga de una buena salud mental.
Es cierto que, jamás ninguna época viviente, ha sido un sueño sin cruces. Salgamos al encuentro. Disfrutemos del abrazo entre análogos.
Parménides contradice a Heráclito y sostiene que ningún cambio ni mutación es posible. Nada vara. Todo es una unidad que permanece inalterable.
El problema es que este impacto sobre la morbilidad y la mortalidad no se puede medir con un simple valor económico.
Todo se valora por el concepto de propiedad: dinero, belleza, fama, títulos, pertenencia a êlites. Mientras más tengas de todo eso, más se te respeta.
La resiliencia es una capacidad humana que ha sido importante siempre, pero en la sociedad del riesgo que vivimos (Ulrich Bech, 1992 dixit).