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"The Calling" hace templar Panamá
Yovanska Spadafora - Publicado:
La euforia y la desesperación se sumaron a las ansias de los más de mil chicos y chicas que disfrutarían de una desbordante carga de rock, interpretada por un nuevo grupo de Los Angeles, California, que está dando de qué hablar, "The Calling".El tiempo corría y los gritos se apoderaron del lugar, cuando, a las 7:45 p.m., los integrantes de las largas filas de ambas locaciones aclamaban para que se abrieran las puertas del Centro de Convenciones del Hotel El Panamá.Era sorprendente la muchachada que se dio cita al lugar, en donde sobresalían más los menores de edad, algunos acompañados con sus madres.Pero, no menos importante, también asistieron fanáticos del rock un poco más grandecitos, que han dado buena acogida a este nuevo grupo.Colocados ya cada uno en sus puestos de combate, la desesperación aumentó, ya que la espera se hizo eterna para algunos, pero para otros valió la pena.Y, bueno, no podía faltar que algunos aprovecharan el espacio para disfrutar de una refrescante bebida, un relajante trago o simplemente unas "boquitas" para que la espera pasara inadvertida.A eso de las 9:00 p.m., los "¿cuándo?, ¿cuándo?" emanaban de las ya fatigadas voces de los que guardaban la salida de "The Calling".Media hora después, los gritos, que por supuesto se mezclaron en uno solo, dieron la alerta de que Alex Band, vocalista de la banda, Aaron Kamin´s y Sean Woolstenhulme, ambos en la guitarra, acompañados de Nate Wood en la batería y Billy Mohler en el bajo, se apoderaron del escenario para interpretar la primera canción de la noche, "For You".Con un español un poco limitado, Alex Band dijo a toda su fanaticada amante de sus hebras de cabello color oro, quienes a su vez lo aclamaban por su nombre, "muchas gracias, for coming at see us".Las flores volaban en dirección a la tarima, en donde una escenografía conformada por luces robótica y un enorme "banners" de la banda, le daban ese toque de originalidad que ha caracterizado a la banda que ha sabido ponerle un ritmo melodioso al rock.En total fueron once canciones interpretadas por "The Calling", entre las que sobresalieron, "Find Answer", "When it all falls down" (de otro grupo), "Alive", "Stigmatized", "One by One", entre otras.Y cuando por fin "The Calling" anuncio su "last song" (recuerden su español limitado), un abucheo se lo impidió, por lo que tuvo que regresar al escenario y complació a su fanaticada con un el "cover" del reconocido grupo "U2".¡Ya se deben imaginar como se puso la cosa!Estilo de Vida tuvo acceso a la opinión de muchos de los asistentes seguidores de la música rock, a cerca del primer concierto en nuestro país de esta banda que en poco tiempo ha alcanzado celebridad, a lo que todos se limitaron a decir, ¡excelente!En "Amarte duele", lo que Sariñana construye para moralizar lo destruye con tantos lugares comúnes, al punto de que, para colmo de males, termina por dañar con un final tan zonzo que hasta molesta.Pero no todo en este trabajo es cuestionable.Tiene buena técnica y algunas buenas "rolas" de Natalia Lafourcade, aunque abusan con tantas canciones dentro del filme y hasta peca de tener desnudos innecesarios que pudieron hacer que la cinta fuera para todo público, porque al fin y al cabo lo que se ve en la cinta, ya se ha visto en las telenovelas.Título del filme: Buscando a NemoQueríamos ponerle: ¡Pescaítos...! Director: Andrew Stanton y Lee UnkrichElenco (voces): Albert Brooks, Ellen De Generes, Alexander Gould (Nemo) y Williem Dafoe.Veamos la cuestión en su justa perspectiva.Nemo es el único huevecillo que sobrevivió de 400 devorados por un pez predador que también se llvó a su madre.Su padre, Marlin, un pez payaso (que no sabe decir chistes) es sobreprotector, basado en la amarga experiencia que acabó con la familia.En fin, Nemo es un pececillo con una discapacidad en la aleta derecha, "la especial", pero eso no lo detiene porque el pescaíto es perseverante, atrevido y lleno de ímpetu, cuestión que asusta a su papá.Durante su primer día de clases, Nemo cuestiona la sobreprotección de su padre y, por cosas del guión, es atrapado por un dentista pescador que lo deposita en una pecera esperando convertirse en la atracción de Darla, la sobrina del dentista.Claro, Marlin hace un viaje de locuras, típico en estas películas (ver ejemplo de "Monsters Inc.", "A bug"s life" o "Toy Story").Por lo demás, aventuras sin límites con una dama pez que pierde la memoria inmediatamente, un trío de peces predadores en franco proceso de rehabilitación (no comerán peces) comandados por el gran Bruce, pero siempre tentados por su pasado vicioso, una tortuga líder de un "tripioso" grupo submarino y cuantos "gags" que tributan al cine de Stanley Kubrick ("Viene Bruuuuceee", como el Johnny de "El Resplandor") o Alfred Hitchcock (la llegada de Darla con la música de "Psicosis") conforme avanza el relato.John Lasseter y Pixar estudios apuestan por redefinir el futuro de los animados para niños, sacando del clisé a sus personajes, mas no sus historias o ritmo narrativo, y acercando más al adulto padre de familia para que presencie el espectáculo para que el niño lo entienda mejor con las explicaciones de los papás.La buena noticia es que, con estas cintas, al menos, hay una concepción más sincera de la realidad familiar.Si en la anterior cinta de Disney, "Lilo y Stich", el núcleo familiar está en la disfuncionalidad de dos hermanas sin padres que adoptan a un extraterrestre rebelde, pícaro y juguetón, ahora con Nemo, el público se encuentra con un pequeño pez minusválido, hijo de padre viudo que descubre que la sobreprotección de su progenitor no es necesariamente señal de cobardía frente al mundo exterior.Por el contrario, el hijo se da cuenta que Marlin es capaz de combatir a extrañas medusas, feroces tiburones y otros monsruos marinos, viajar de océano a océano y pelearse con quien se ponga por delante por amor al hijo.¡Ahhh!, no olvidar que "Buscando a Nemo" es muy, muy divertida, pero, reflexionen señores...Es una película de Disney, pero tiene sus mensajes, ¿ehhh?.Título del filme: Piratas del Caribe: La maldición del Perla NegraQueríamos ponerle: El pirata rock star contra los truhanes calavera Director: Gore VerbinskiElenco: Johnny Depp, Geoffrey Rush, Orlando Bloom y Keira Knightley.La última vez que vi una gran película de piratas fue en 1984 cuando presentaron "Islas Salvajes", llamada en inglés "Nate & Hayes", con Tommy Lee Jones encarnando al bucanero "Bully" Hayes, asociándose con el joven misionero Nate (Michael O"Keefe) para salvar a su prometida Sophie (Jenny Seagrove), secuestrada por el villanísimo Ben Pease (Max Phipps) que quería sacrificarla en la isla King Owatopi.Si mi memoria no me falla, habrá sido en el otrora cine Savoy de Bethania.Once años más tarde, en 1995, pasaron un filme titulado "La Pirata", de Renny Harlin ("Duro de matar 2" y "Cliffhanger", como sus mejores películas), que siendo necesariamente malo, era entretenido y tenía muy buenos efectos especiales.Después nos enteramos que esta producción casi lleva a la bancarrota a la compañía Carolco y es considerado un récord guinness como la más cara producción que ha tenido los peores registros en taquilla hasta la fecha.Esta reflexión nos lleva a "La maldición de la Perla Negra" -producida por Jerry Bruckheimer, el orquestador de varios de los taquillazos de estudio en los años ochentas, noventas y en estos días, entre ellos: "American Gigoló", "Flashdance", "Beverly Hills Cop", "Top Gun", "Bad Boys", "La Roca Armageddon", "Con Air", "Enemigo del Estado", "Pearl Harbor", "Coyote Ugly", "Cargaroo Jack"...por mencionar unos cuantos- una aventura estándar llevada a la máxima potencia por las caracterizaciones de Johnny Depp como el pirata rockstar Jack Sparrow (según él, inspirado en el Rolling Stone Keith Richards y con todas las libertades concedidas por el director Gore Verbinski para hacer éste a la medida del excéntrico actor) y Geoffrey Rush."Piratas del Caribe" no es ingeniosa en su historia, repite el viejo modelo argumental del género, pero se apoya en parodias necesarias para revitalizar esta tendencia frente a audiencias más jóvenes que necesitan salir de los conocidos paradigmas del cine de estas décadas.Podría considerarse este filme como una buena revisión a la nostalgia del "Hollywood" antes de la crisis de fines de los años cincuenta que abarcó todos los años "60 y se detuvo a finales de los "70, cuando se revitalizó la industria con la influencia de Coppola ("El Padrino"), Spielberg ("Tiburón"), Lucas ("StarWars") y Scorsese ("Taxi Driver").Si bien la historia es conocida a través de la literatura y el cine "swachbuckler", el acierto de este filme radica en la revisión que hicieron los guionistas Ted Elliot y Terry Rossio (Shrek), basados en la idea del parque temático de Disney.Pero veamos, Piratas del Caribe: La maldición del Perla Negra es más entretenida que La Momia de Stephen Sommers, otra revisada al género del cine mainstream clásico del viejo y recordado cine de oro, y para gusto de los fans tiene buena dosis de diversión garantizada.Si no les conté por dónde va la historia, entonces vayan a verla y echamos el cuento.