Caminamos rantan... y lo ‘pretty’ es menearme en cada paso

La vida es una ponchera y yo soy un acelera'o. Eso es pa' mí desde chiquitín. Mi viejo siempre me decía: "Goza lo que estás haciendo ahorita", al que yo le respondía: "Es que quiero llegar ya". Y el me miraba bien calmadito para bajarme las revoluciones y decirme dizque: "Apenas llegues, se te va a acabar y ya no lo vas a poder disfrutar". Yo lo traduzco a: "Tengo que menearme".

La verdad es que cada día que pasa ¡ufff!, comprendo un poco más que el momento hay que saborearlo cuando está sucediendo.

Las veces que lo hago salgo con el pecho lleno de buen feeling. Y esto se proyecta como sonrisa. Y un buen meneo.

He visto que este sentimiento va ligado a cada paso que voy dando en la vida. La verdad es que no sé qué sucederá mañana... eso sí, mi hoy tiene que ser wow.

Para lograr esto, la regla es que tengo que menearme mientras doy ese paso, yo tengo que sentir mientras doy ese paso, yo tengo que lograr que al acostarme solo demore 30 segundos para caer dormido. Jenny me pregunta: "¿Cómo usted hace eso?"... yo me río y le respondo bien cursi dizque: "Vida plena". Rico el meneo, jaja.

El jueves tuve la oportunidad de entrevistar a Eduardo Verdurmen en Dímelo Cantando. La conversa que en teoría debe durar 2 horas, llegó a 4 horas y media. Brutal... ¡4 horas y media y nos quedamos cortos!

Este man ha hecho tantas cosas en su vida, ha experimentado tanto, que aún me tiene hyper. Pasó de ser cantante de Quarzo y poner semillas a todo lo bueno que sucede musicalmente en nuestro país, a ser director en efectos especiales, guionista, escritor, profesor, director.

Jenny pregunta: "¿Cómo hace tantas cosas?"... y notamos que realmente las ha hecho a través de su vida, no las hace todas a la vez.

Más bien una cosa lo ha llevado a otra... el paso de hoy lo ha llevado al paso de mañana. Y cuando lo escuchas hablar, sientes el poder que hay en gozar cada suceso... ese es su buen meneo.

Recuerdo que mi viejo también me aportó buco diciendo: "La cosa no es pegar y desaparecer. Tu vida se acaba como en 50 o 60 años. Cada día sé un poquito mejor en lo que haces, hazlo paso a paso y te va a durar para siempre".

También recuerdo que por ahí leí este cálculo... Si soy 1% mejor cada día, imagínate qué tanto % mejor seré en un año. Waaa, pa’ menea.

Aprovecho a invitarte a ver la historia de la vida de Eduardo Verdurmen. Buco humanización y motivación. Encuentras su Dímelo Cantando en RobaMorena.com.

En fin, mi día mañana quién sabe qué sopá... y en mi hoy estoy seguro de que me voy a contonear.