De humorista a candidato
Publicado 2004/02/01 00:00:00
- Yovanska Spadafora
El 12 de octubre de 1976 nació Luis Carlos Cleghorn Palomino, mejor conocido como "Agapito", reconocido a nivel nacional por formar parte del "staff" del programa "La Cáscara", en el que personalizó a figuras como "El Mimado", "El candidato del Partido del Billete", "El Dandi", entre otros.
Pero, ¿quién iba a pensar que entre tanto desorden, justificado, existiría un joven con una visión del mundo diferente, con un ideal de candidato a legislador con fundamento y un plan de trabajo concreto para solucionar los resquebrajamientos de cada sector de la sociedad?
Pues éstos son los ideales de Agapito, hijo de Carlos Cleghorn y María Eloisa Palomino, quien, con tan solo 27 años de edad y con la puesta en marcha de un trabajo eficiente, se ha ganado el privilegiado espacio de número uno de la papeleta Arnulfista, corriendo como legislador para el circuito 8-9.
¿En qué ha cambiado tu imagen al pasar de humorista a figura política?
Mi imagen ha cambiado muchísimo. Antes el público percibía a "Agapito" como un personaje de televisión jocoso, payaso, entre tantas definiciones. Hoy en día me proyecto como un joven que aspira a ser un legislador con fundamento y un plan de trabajo concreto para cada sector.
¿Qué has tenido que cambiar por obligación ahora que eres político?
Ahora tengo que ser más responsable en mi forma de hablar y comportamiento, pero no te miento, siempre quiero tratar de ser la misma persona alegre, porque siento que el ser alegre no debe ser un desperfecto o un defecto de un legislador, en tal caso.
¿De dónde sale la idea de incursionar en la política?
Desde que era un niño siempre me ha gustado la política al igual que el humor, pero nosotros empezamos a caminar en esto desde el año 2000 cuando decidimos empezar a participar en las actividades del partido y aprender nuevas cosas. Pero, realmente la parte social y la de la verdadera política ya yo las conocía, ya que durante más de quince años he trabajado en diversas obras sociales, he dirigido grupos en iglesias, agrupaciones juveniles, etc.
¿En qué ha cambiado tu vida desde que perteneces a la política?
La vida de la televisión es muy diferente y en lo único que se parece a la política es que se duerme poco y se come mucho. Cuando yo estaba en la televisión era una vida muy libre, en el sentido de que se vivía solamente para lo que se tenía que proyectar en cámaras. Ahora la política es diferente, tú tienes compromisos, la mayoría de ellos exigen que tengas siempre una repuesta positiva para las personas. En la televisión era la vida de un muchacho con mucha diversión, mucha fiesta, mucha parranda y gracias a Dios hicimos un acomodo y me reorganicé. Pero, eso sí, antes de entrar a la política ya era un muchacho serio.
¿Qué has aprendido de la política?
Todos los día aprendo cosas nuevas. Puedo decir claramente, yo no quiero ser un político, quiero ser un legislador enfocado en el mercadeo, la promoción de sistemas, la creación de leyes que promuevan mejores derechos y mejores estilos de vida. Todos los días me doy cuenta que los que dañan la política son personajes; la política no es mala, puede ser muy buena si la manejas bien, el problema es que hay tantos personajes que a través de la historia la han empañado. También he aprendido que hay impurezas, hay gente muy mala a la que la envidia se la come. Ya te digo, yo tengo 27 años y con mi edad me gané el derecho de ser número uno en la papeleta de un partido, independientemente de lo que diga la gente.
¿Qué piensan tus amigos de la Cáscara?
Ellos son mis hermanos y todavía me quedan imborrables recuerdos con ellos. Ellos me apoyan y están contentos; al principio me decían "tu estás loco", pero ahora me dicen que mi triunfo es de ellos, porque al yo ganar se va a demostrar que la juventud que persevera y decide hacer algo puede triunfar en este país.
¿Por qué declinó tu faceta como cantante?
Yo nunca fui cantante. Quiero aclarar que lo que pasó fue que mi papá, Carlos Cleghorn, grababa su último disco para posteriormente retirarse del mundo de la música, y siempre tuvimos el sueño de grabar una canción que quedara plasmada en una producción discográfica y eso fue lo que hicimos. Más que todo fue un capricho de padre e hijo que cumplimos y se mal interpretó el que yo quería ser cantante de música típica, la cual me encanta.
¿Qué se puede esperar de Agapito como legislador?
Primero que todo sinceridad, ya que no me gusta decir mentiras. No prometo nada, más bien me gusta sentarme con las personas a analizar proyectos y ver posibilidades reales. Le garantizo a las personas que pueden esperar a un legislador joven y diferente, y cuando hablo de diferente, no van a ver a un payaso en la Asamblea. En conclusión, van a ver a un legislador responsable del cual todas las personas que le den su voto se van a sentir orgullosas y tal vez otras van a desear entonces haber podido votar por nosotros.
¿Cuál es el propósito de tu campaña?
Recuperarle la fe a las personas en Panamá, y hacer saber que sí se puede trabajar honestamente.
Cuando estabas en La Cascara te burlabas de muchos políticos, como Guillermo Endara ¿Cómo te sientes ahora que estás en su bando?
Como te dije anteriormente, el problema radica en que hay personajes que dañan la política, hay personas que son legisladores y nunca son vistos en los medios y muchas veces son legisladores reelectos, pero es porque son gente que trabaja, se dedica a realizar sus obras desde la comunidad.
¿Qué oportunidades le ofrecerías a la mujer panameña?
Para mí es muy importante la mujer. Existe un convenio que establece que la mujer panameña tiene derecho al 30% de las postulaciones; eso no se ha cumplido en gran parte, la mujer necesita que se le apoye más y que hayan más incentivos. Nosotros trabajaremos en sistemas que le permitan a ellas tener su espacio.
¿Qué harías si no sales electo?
Seguir trabajando, soy empresario y no me apartaría de la política, porque creo que independientemente estamos aprendiendo muchas cosas. Creo que me prepararía mejor para una segunda contienda.
Pero, ¿quién iba a pensar que entre tanto desorden, justificado, existiría un joven con una visión del mundo diferente, con un ideal de candidato a legislador con fundamento y un plan de trabajo concreto para solucionar los resquebrajamientos de cada sector de la sociedad?
Pues éstos son los ideales de Agapito, hijo de Carlos Cleghorn y María Eloisa Palomino, quien, con tan solo 27 años de edad y con la puesta en marcha de un trabajo eficiente, se ha ganado el privilegiado espacio de número uno de la papeleta Arnulfista, corriendo como legislador para el circuito 8-9.
¿En qué ha cambiado tu imagen al pasar de humorista a figura política?
Mi imagen ha cambiado muchísimo. Antes el público percibía a "Agapito" como un personaje de televisión jocoso, payaso, entre tantas definiciones. Hoy en día me proyecto como un joven que aspira a ser un legislador con fundamento y un plan de trabajo concreto para cada sector.
¿Qué has tenido que cambiar por obligación ahora que eres político?
Ahora tengo que ser más responsable en mi forma de hablar y comportamiento, pero no te miento, siempre quiero tratar de ser la misma persona alegre, porque siento que el ser alegre no debe ser un desperfecto o un defecto de un legislador, en tal caso.
¿De dónde sale la idea de incursionar en la política?
Desde que era un niño siempre me ha gustado la política al igual que el humor, pero nosotros empezamos a caminar en esto desde el año 2000 cuando decidimos empezar a participar en las actividades del partido y aprender nuevas cosas. Pero, realmente la parte social y la de la verdadera política ya yo las conocía, ya que durante más de quince años he trabajado en diversas obras sociales, he dirigido grupos en iglesias, agrupaciones juveniles, etc.
¿En qué ha cambiado tu vida desde que perteneces a la política?
La vida de la televisión es muy diferente y en lo único que se parece a la política es que se duerme poco y se come mucho. Cuando yo estaba en la televisión era una vida muy libre, en el sentido de que se vivía solamente para lo que se tenía que proyectar en cámaras. Ahora la política es diferente, tú tienes compromisos, la mayoría de ellos exigen que tengas siempre una repuesta positiva para las personas. En la televisión era la vida de un muchacho con mucha diversión, mucha fiesta, mucha parranda y gracias a Dios hicimos un acomodo y me reorganicé. Pero, eso sí, antes de entrar a la política ya era un muchacho serio.
¿Qué has aprendido de la política?
Todos los día aprendo cosas nuevas. Puedo decir claramente, yo no quiero ser un político, quiero ser un legislador enfocado en el mercadeo, la promoción de sistemas, la creación de leyes que promuevan mejores derechos y mejores estilos de vida. Todos los días me doy cuenta que los que dañan la política son personajes; la política no es mala, puede ser muy buena si la manejas bien, el problema es que hay tantos personajes que a través de la historia la han empañado. También he aprendido que hay impurezas, hay gente muy mala a la que la envidia se la come. Ya te digo, yo tengo 27 años y con mi edad me gané el derecho de ser número uno en la papeleta de un partido, independientemente de lo que diga la gente.
¿Qué piensan tus amigos de la Cáscara?
Ellos son mis hermanos y todavía me quedan imborrables recuerdos con ellos. Ellos me apoyan y están contentos; al principio me decían "tu estás loco", pero ahora me dicen que mi triunfo es de ellos, porque al yo ganar se va a demostrar que la juventud que persevera y decide hacer algo puede triunfar en este país.
¿Por qué declinó tu faceta como cantante?
Yo nunca fui cantante. Quiero aclarar que lo que pasó fue que mi papá, Carlos Cleghorn, grababa su último disco para posteriormente retirarse del mundo de la música, y siempre tuvimos el sueño de grabar una canción que quedara plasmada en una producción discográfica y eso fue lo que hicimos. Más que todo fue un capricho de padre e hijo que cumplimos y se mal interpretó el que yo quería ser cantante de música típica, la cual me encanta.
¿Qué se puede esperar de Agapito como legislador?
Primero que todo sinceridad, ya que no me gusta decir mentiras. No prometo nada, más bien me gusta sentarme con las personas a analizar proyectos y ver posibilidades reales. Le garantizo a las personas que pueden esperar a un legislador joven y diferente, y cuando hablo de diferente, no van a ver a un payaso en la Asamblea. En conclusión, van a ver a un legislador responsable del cual todas las personas que le den su voto se van a sentir orgullosas y tal vez otras van a desear entonces haber podido votar por nosotros.
¿Cuál es el propósito de tu campaña?
Recuperarle la fe a las personas en Panamá, y hacer saber que sí se puede trabajar honestamente.
Cuando estabas en La Cascara te burlabas de muchos políticos, como Guillermo Endara ¿Cómo te sientes ahora que estás en su bando?
Como te dije anteriormente, el problema radica en que hay personajes que dañan la política, hay personas que son legisladores y nunca son vistos en los medios y muchas veces son legisladores reelectos, pero es porque son gente que trabaja, se dedica a realizar sus obras desde la comunidad.
¿Qué oportunidades le ofrecerías a la mujer panameña?
Para mí es muy importante la mujer. Existe un convenio que establece que la mujer panameña tiene derecho al 30% de las postulaciones; eso no se ha cumplido en gran parte, la mujer necesita que se le apoye más y que hayan más incentivos. Nosotros trabajaremos en sistemas que le permitan a ellas tener su espacio.
¿Qué harías si no sales electo?
Seguir trabajando, soy empresario y no me apartaría de la política, porque creo que independientemente estamos aprendiendo muchas cosas. Creo que me prepararía mejor para una segunda contienda.
Para comentar debes registrarte y completar los datos generales.