Derroche de sensualidad en desfile de Victoria's Secret 2013

Aunque oficialmente no podrá verse hasta el 10 diciembre, día en el que será emitido por la cadena estadounidense CBS, el desfile anual de Victoria's Secret se pregrabó el 14 de noviembre, como suele pasar con la mayoría de especiales de Navidad, en la armería de la calle Lexington de Nueva York.

Un enclave histórico a prueba de pasarelas visto que es donde suele presentar también sus colecciones Marc Jacobs cada New York Fashion Week. Si bien son varias las firmas de lencería que se han apuntado a este mismo formato para conseguir un mayor impacto (entre ellas la italiana Calzedonia o, recientemente, una de las enseñas de Cortefiel, Women'Secret) las alas de los ángeles de Victoria siguen marcando la diferencia: este es uno de los acontecimientos más esperados del año.

En palabras de uno de los ejecutivos de Limited Brands, la compañía propietaria de la marca, el desfile de Victoria's Secret "es el anuncio más entretenido, largo y rentable del año" para su filial. Aunque no se emite en una fecha fija, no es casualidad que se elija siempre la primera semana de diciembre, acto seguido del pelotazo comercial que suponen el Black Friday y el Cyber Monday. El día después de la emisión del desfile es el que mayores ventas genera para la firma de ropa interior.

El desfile en cifras

Este 2013 llega a su 18 edición y necesitó 9 meses de preparación. Entre sus propuestas se encuentra el sujetador "Royal Fantasy Bra", adornado con 4.200 rubíes, diamantes de 18 quilates así como zafiros azules y amarillos rematados por un ejemplar de 52 quilates coronando su escote: está valorado en 7.5 millones de euros (el más caro de la historia lo llevó Gisele Bündchen en el año 2000).

40 modelos con una altura media de 1'80 calzaron zapatos con tacón de 15 cm y vestido 28 pares de alas repartidas en 67 "looks". El equipo profesional estuvo formado por 26 maquilladores, 22 peluqueros, 8 manicuristas y una audiencia estimada de 12 millones de espectadores en 185 países.