El arte del laqueado

Es el proceso de aplicación de barniz y tintes sobre superficies de un material que por lo general es madera, enchapados e incluso paredes debidamente pasteadas.

Se presume que el laqueado es originario de China y que después se extendió al Japón.

Actualmente por lacar o laquer se entiende la aplicación de un esmalte mas o menos brillante, de excelente calidad que les dará a las superficies mencionadas una película tersa y lisa.

Para conseguir estos acabados es muy importante la preparación de las superficies que se van a trabajar.

Orígenes.

En China, las muestras más antiguas de laqueado son algunos fragmentos encontrados en excavaciones arqueológicas correspondientes a la Dinastía Shang; sin embargo, en la época Zhou del Este y en los Reinos Combatientes es cuando y donde la laca se convirtió en una expresión artística de importancia.

En Europa, el laqueado se conoció por primera vez durante el Renacimiento.

Hasta el siglo XVII importar las piezas originales era tan caro que los europeos intentaron imitar la técnica y es lo que se conoce como "laca europea", la cual consiste en cubrir la madera o superficie con una capa muy fina de yeso mate o escayola para lograr una superficie dura sobre la cual se extiende con un pincel goma laca de color negro o coloreada disuelta en alcohol etílico.

Después se aplica una decoración en relieve o bajorrelieve o pintada, por lo general es un estilo que imita el arte chino.

Esta técnica se aplicó sobre todo a los escritorios y arcones.

Uso.

Se utiliza para proteger la madera y tiene más dureza que los barnices.

Se necesitan menos manos para obtener un acabado perfecto y una de sus virtudes es la gran rapidez de su secado, lo cual evita que se adhieran bruscas y otros elementos del ambiente.

Su duración es superior a la que alcanzan otro tipo de aplicaciones y pinturas.

Los tonos aplicados no cambian luego de secarse.

La laca se puede utilizar en todo tipo de maderas, nos explica Madelin Acqui, Asesora Técnica de Pinturas Sur, después que la madera tenga un grado de humedad aceptable (hasta un 18% es permitido), no se recomiendan porcentajes superiores.

En Panamá este tipo de trabajo es artesanal.

Preparación.

La superficie debe estar perfectamente lijada y acaba con un lija muy fina, seguidamente debe pasarse una lana de acero en la dirección de la veta (para quitar el pelo de la madera) y eliminar el polvo generado.

La superficie debe quedar muy limpia y suave al tacto.

Se debe aplicar con una brocha, sellador para madera para que tape el poro y la pintura cubra perfectamente.

Cuando el sellador esté completamente seco se debe pasar nuevamente la lana de acero y quitar el polvo generado.

Aplicación.

Una vez lista la superficie se aplican las manos necesarias de la laca, el sellador de la laca se puede aplicar a mano (muñequear) o con pistola, pero el acabado debe realizarse con un compresor debidamente calibrado, ya estos productos son de secado rápido.

En época de lluvias o de mucha humedad no se deben ejecutar estos trabajos ya que el terminado no será de calidad, el mismo presentará unas feas vetas blanquecinas que parecen nubes.

El tiempo de sol es importante para un buen resultado del trabajo de laqueo.

Aplique tantas manos como sea necesario para que el terminado sea excelente y no presente defectos.

Un buen laqueo depende de: clima, buenos materiales y excelente mano de obra.