"Eurodiet" baja de peso a la europea

Lucir una esbelta figura y que toda la ropa ajuste bien es lo que todos deseamos.

No se trata de hacer una dieta simplemente, se busca además gozar de buena salud.

Sin embargo, son muchas las personas las que inician diversos tipos de dietas, que leen en revistas o practicadas por amigos sin ninguna supervisión médica, cometiendo un grave error.

Al iniciar un régimen alimenticio, debes contar con la supervisión de un médico, los efectos para tu salud pueden resultar perjudiciales y hasta permanentes especialmente en la adolescencia, señala la Dra.

Itzel Velásquez nutricionista del Centro de Nutrición y Obesidad ubicado en el Hospital San Fernando-Especializado.

Es en esta etapa del desarrollo cuando se requiere ingerir ciertos nutrientes.

La especialista manifiesta que si el joven se privada de las calorías y nutrientes necesarios para su crecimiento puede llegar a presentar síntomas simples como astenia (agotamiento físico como psíquico) y adinamia (debilidad muscular) hasta los más complejos como mareos, desmayos, desnutrición y en casos extremos anorexia o la muerte.

Es por ello que para iniciar una dieta apropiada hay que tomar en cuenta el estado de salud, la edad, sexo, masa corporal (incluye estatura y peso) además, es necesario determinar el grado de sobrepeso u obesidad en que se encuentra el paciente.

De igual manera es importante conocer el estado emocional, nutricional, y las actividades físicas que realiza.

Recientemente el Método Eurodiet creado en Europa, Luxemburgo fue estudiado en nuestro país por las doctoras Itzel Velásquez y Lissis Serrano quienes lo adecuaron a los hábitos alimenticios de los panameños.

Es un programa estructurado en cuatro fases, en el que se toman en cuenta tus objetivos, gustos, necesidades sociales y profesionales.

A través de este método se pierde peso preservando los músculos, a la vez se elimina grasa con la ingesta de productos altos en proteínas, bajo en carbohidratos y con suplementos y minerales que impiden la desnutrición del paciente.

Se realiza en cuatro fases que determinará el especialista, por lo que resulta un programa fácil, rápido, confiable y duradero.

Nutrición proteínica: Tiene una duración de 10 a 30 días y le asegura un adelgazamiento rápido, debido a la pérdida de grasa.

Se basa en la ingesta casi exclusiva de proteína de alto valor biológico.

Nutrición selectiva: Se recomienda durante 20 a 40 días.

Es importante su realización tras la segunda fase.

Es más flexible y se adapta a aquellas personas son "compromisos sociales", pues incluye una verdadera manteniendo la proporción necesaria de proteínas que permiten un buen adelgazamiento.

Nutrición gradual: Es la fase esencial del método Consiste en la introducción gradual de los carbohidratos asociado a un plan alimentario personalizado y adaptado a cada persona, este período, de duración también adaptada a cada caso, le llevará gradualmente a una alimentación balanceada.

Es importante hacer ejercicios físicos en esta fase.

Nutrición balanceada: Su principal objetivo es mantener el peso bajo con el tiempo.

Aquí ya haz logrado perder peso con relativa facilidad y se encuentra bien; un seguimiento regular, apoyo conductual y consejos nutricionales adaptados a sus necesidades le ayudarán a mantener estos resultados a través del tiempo.

Alimentación variada, bien balanceada y moderada.

Comer porciones razonables de alimentos, ya sean frutas, vegetales, cereales, granos y productos lácteos cuya grasa ha sido removida o rebajada.

Eliminación completa de la sal si es posible, substituyéndola con especias.

Consumo moderado de azúcar y bebidas alcohólicas.

La manera de planear una dieta saludable, comer de 6 a 11 porciones diarias de granos, pan, cereal, arroz, pasta; tres a cinco de verduras y vegetales; dos a cuatro porciones de frutas; dos a tres de leche, queso, yogurt y otros productos lácteos y el mismo número de porciones de alimentos ricos en proteínas, como carne, huevos, aves, pescado y nueces.

Estos alimentos proveen los nutrientes esenciales, vitaminas, minerales, proteínas, fibra, carbohidratos y grasas necesarios para una buena salud.

Tener energía durante todo el día.

Ingerir las vitaminas y minerales que se necesitan.

Mantenerte fuerte para realizar deportes y otras actividades.

Mantener un peso que sea el mejor para tu cuerpo.

Prevenir hábitos de alimentación que no sean saludables.