Inhaladores con esteroides para enfisema y bronquitis crónica
Publicado 2001/01/01 00:00:00
- REDACCIÓN
Las personas con enfermedades respiratorias crónicas pueden mejorar con inhaladores que contienen esteroides, pero eso no frena el daño a los pulmones, según un estudio que publica la revista New England Journal of Medicine.
La enfermedad pulmonar obstructiva crónica incluye el enfisema, algunas formas de asma y la bronquitis crónica y es la cuarta causa de muerte en Estados Unidos.
El enfisema es un trastorno en el que los alveolos pulmonares se inflan en exceso, lo cual acaba destruyendo las paredes de esas cavidades y disminuyendo la capacidad respiratoria.
La investigación científica ha demostrado que en los pulmones normales hay un equilibrio entre dos clases de agentes químicos con efectos opuestos, cuya alteración destruye las fibras elásticas que permiten la contracción y expansión de los pulmones.
Este desequilibrio químico ocurre por diversos motivos.Al hábito de fumar, por ejemplo, se atribuyen el 82 por ciento de las muertes causadas por la enfermedad pulmonar obstructiva crónica.
El estudio, dirigido por Robert Wise, de la Escuela de Medicina de la Universidad John Hopkins de Baltimore (Maryland), encontró que los pacientes que inhalaron un esteroide experimentaron menos síntomas y necesitaron menos visitas al hospital que quienes no lo usaron, pero la capacidad pulmonar deteriorada siguió sin mejoría.
Estas conclusiones, similares a las de otros estudios sobre los efectos de los esteroides inhalados, sugieren que el tratamiento puede ser beneficioso para los pacientes que tienen el mal moderado o grave, pero no para los que sufren una enfermedad pulmonar obstructiva leve.
En un editorial que acompaña al estudio, Christina Elisabetta Mapp, de la Universidad de Padua (Italia) indicó que el mejor tratamiento para prevenir el padecimiento es que se deje de fumar.
Los investigadores no encontraron diferencias en la capacidad pulmonar de 559 voluntarios que habían recibido el esteroide inhalable triamcinolona y 557 a quienes se administró un placebo.
El grupo que tomó triamcinolona tuvo un 25 por ciento de síntomas menos y realizaron un 43 por ciento menos de visitas a los médicos en relación con los problemas respiratorios.
Sin embargo el tratamiento con esteroides inhalables puede debilitar los huesos, y Mapp dijo que, a pesar de sus beneficios, el tratamiento con esteroides "no altera el avance de la obstrucción del flujo de aire".
Unos dos millones de estadounidenses padecen de enfisema, mal que ocupa el decimoquinto lugar entre las enfermedades crónicas que contribuyen a una limitación de las actividades.
Casi un 44 por ciento de los pacientes indican que ese padecimiento ha limitado sus actividades cotidianas.
Se calcula que entre 50.000 y 100.000 personas en Estados Unidos sufren desde su nacimiento una deficiencia de la proteína alfa 1-antitripsina (AAT), que puede conducir a un tipo de enfisema hereditario.
Muchos de los pacientes con enfisema son hombres de edad avanzada, pero la incidencia del trastorno entre las mujeres está en aumento.El número de hombres con enfisema excede al de mujeres en un 54 por ciento.
La enfermedad pulmonar obstructiva crónica incluye el enfisema, algunas formas de asma y la bronquitis crónica y es la cuarta causa de muerte en Estados Unidos.
El enfisema es un trastorno en el que los alveolos pulmonares se inflan en exceso, lo cual acaba destruyendo las paredes de esas cavidades y disminuyendo la capacidad respiratoria.
La investigación científica ha demostrado que en los pulmones normales hay un equilibrio entre dos clases de agentes químicos con efectos opuestos, cuya alteración destruye las fibras elásticas que permiten la contracción y expansión de los pulmones.
Este desequilibrio químico ocurre por diversos motivos.Al hábito de fumar, por ejemplo, se atribuyen el 82 por ciento de las muertes causadas por la enfermedad pulmonar obstructiva crónica.
El estudio, dirigido por Robert Wise, de la Escuela de Medicina de la Universidad John Hopkins de Baltimore (Maryland), encontró que los pacientes que inhalaron un esteroide experimentaron menos síntomas y necesitaron menos visitas al hospital que quienes no lo usaron, pero la capacidad pulmonar deteriorada siguió sin mejoría.
Estas conclusiones, similares a las de otros estudios sobre los efectos de los esteroides inhalados, sugieren que el tratamiento puede ser beneficioso para los pacientes que tienen el mal moderado o grave, pero no para los que sufren una enfermedad pulmonar obstructiva leve.
En un editorial que acompaña al estudio, Christina Elisabetta Mapp, de la Universidad de Padua (Italia) indicó que el mejor tratamiento para prevenir el padecimiento es que se deje de fumar.
Los investigadores no encontraron diferencias en la capacidad pulmonar de 559 voluntarios que habían recibido el esteroide inhalable triamcinolona y 557 a quienes se administró un placebo.
El grupo que tomó triamcinolona tuvo un 25 por ciento de síntomas menos y realizaron un 43 por ciento menos de visitas a los médicos en relación con los problemas respiratorios.
Sin embargo el tratamiento con esteroides inhalables puede debilitar los huesos, y Mapp dijo que, a pesar de sus beneficios, el tratamiento con esteroides "no altera el avance de la obstrucción del flujo de aire".
Unos dos millones de estadounidenses padecen de enfisema, mal que ocupa el decimoquinto lugar entre las enfermedades crónicas que contribuyen a una limitación de las actividades.
Casi un 44 por ciento de los pacientes indican que ese padecimiento ha limitado sus actividades cotidianas.
Se calcula que entre 50.000 y 100.000 personas en Estados Unidos sufren desde su nacimiento una deficiencia de la proteína alfa 1-antitripsina (AAT), que puede conducir a un tipo de enfisema hereditario.
Muchos de los pacientes con enfisema son hombres de edad avanzada, pero la incidencia del trastorno entre las mujeres está en aumento.El número de hombres con enfisema excede al de mujeres en un 54 por ciento.
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