La elegancia de un mantel

Las mantelerías son atractivas y delicadas, perfectas para arreglar su mesa en un día festivo o para convertir una cómoda reunión entre amigos en una ocasión especial. Los estilos clásicos mantienen el sentido del terminado del mantel. Usted puede terminar una pieza con el llamado dobladillo de ojo, un terminado a mano que hace del mantel una pieza muy tradicional, según indican muchos conocedores
No se resista a esos pequeños detalles que hacen de su casa más cómoda, más acogedora y más actual; sin necesidad de realizar una gran inversión. Entre las muchas opciones se encuentra el terminado de festón, se trata de un dibujo o recorte en forma de onda o puntas que adorna la orilla o borde del mantel.
Lo clásico por excelencia consiste en marcar toda la lencería, de cama o de mesa, con las iniciales de la pareja. Esa es una tradición que pasa de generación en generación. A estas piezas las puedes valorar y después recordar, diciendo que ha pertenecido a alguno de tus familiares y antepasados.
Sin embargo, pese al valor de la tradición, los expertos reconocen que ha habido una evolución en el gusto y uso de los manteles. Prevaleciendo la sencillez ante todo y existe una influencia oriental muy fuerte en el mercado imponiendo tendencias a seguir.
Las opciones de un mantel para cualquier individuo se ajustan a sus necesidades y gustos: entre las opciones que tenemos están:
Las elegantes propuestas en diversas tiendas del país son las corrientes europeas, la mantelería de hilo bordada en tonos marfil y beige son excelentes para una decoración festiva.
Las combinaciones de algodón, lino, poliester son de gran textura muestran diseños a cuadros ondas en colores únicos, tienen costos elevados pero el acontecimiento que escoja amerita la inversión.
Los modelos de flores realizados en lino, son sensacionales para una tarde de Té. También los tonos fucsia pueden combinarse con colores más neutros dando como resultado una mezcla bicolor vanguardista.
Estampados de claveles, con cubiertos de porcelanas son una atractiva propuesta para gustos más exigentes.
A la mantelería de aire antiguo realizada en hilo tintado y algodón, puede agregarle cubiertos de plata y copas de cristal, imponiendo un aire de sociedad y buen gusto.