Los secretos de Grace Kelly

¿Cómo era de pequeña? ¿Qué ropa se ponía? ¿Con quién mantenía relación de amistad en Hollywood? ¿Cómo era su vida en Mónaco? A estas preguntas responde la exposición “Los años de Grace Kelly. Princesa de Mónaco” que se presenta en Roma y que quedará abierta al público este viernes, tras la inauguración con la presencia del príncipe Alberto.

Con esta exposición la capital italiana se une al homenaje que el principado realizó a la princesa-actriz en 2007, cuando se conmemoraron los 25 años del fatídico accidente de tráfico que acabó de forma repentina con la vida de Grace Kelly.

La exposición sorprende no sólo por la riqueza de objetos expuestos pertenecientes a la princesa, sino por las imágenes que en cada una de las salas cuentan la vida de este mito de la elegancia nacido en Filadelfia el 12 de noviembre de 1929. “Por primera vez se exponen imágenes rodadas por la propia Grace en las que se ve un guiño de complicidad con Hitchcock” confesó el comisario de la exposición, el ministro de cultura francés, Frédéric Mitterrand, durante la presentación de la exposición hace dos años. Ahora estas imágenes llegan por primera vez a Roma y sorprenden por esa pincelada eficaz que sólo los cineastas poseen.

Fotografías haciendo deporte, cartas escritas de niña y un álbum con recuerdos que van desde trozos de revistas a un paquete de chicles son algunos de los grandes reclamos de la muestra.

Recuerdos de familia.
La exposición se inicia con las portadas de las principales revistas en las que apareció Grace, entre las que destaca “Life”, “Paris Match” y la española “Semana” que titulaba: “La princesa Grace de compras por Madrid”. Este pequeño paseo por la fama introduce de lleno al visitante en la infancia de la niña Grace, en su casa de Filadelfia, rodeada de sus hermanos y padres. Fotografías haciendo deporte, cartas escritas de niña y un álbum como el de cualquier niño con recuerdos que van desde trozos de revistas a un paquete de chicles.

Grace Kelly recibió todo el apoyo de su familia para cumplir su sueño y convertirse en estrella del celuloide. Una carrera que alcanzó su punto más alto con el Óscar ganado en 1954 por “La angustia de vivir”. Precisamente este galardón se puede ver en la exposición de Roma junto a los vestidos que llevó para numerosas galas y fiestas firmados principalmente por Dior y Chanel.

Los carteles de las películas protagonizadas por la tímida actriz entran por la puerta grande en Mónaco, con la exposición del vestido de novia que Grace Kelly lució el día de su boda, el 19 de abril de 1956.

Los recuerdos de familia, a través de imágenes, fotografías y numerosas cartas personales, muestran al espectador cómo era el carácter de esta princesa-actriz.

La exposición homenaje dedicada a la princesa de Mónaco llega a su fin con las joyas personales de Grace Kelly y el bolso Hermés que ella hizo famoso.