Martini, el rey de los cocteles

ES símbolo de estilo, categoría, estatus y por sí solo recrea un ambiente de sensualidad al estilo Hollywood. Esto es un Martini, pero para que el deleite sea completo es necesario una agradable compañía.
En la gran variedad de cocteles, los cuales están en constante cambio y evolución, sin duda alguna el rey de todos es el Martini.
Famoso desde tiempos remotos, el Martini es el trago más sensual, glamuroso y versátil de todos. Actores, políticos, escritores, entre otros han disfrutado de éste excelente trago.
El martini, que aparentemente no parece muy complicado en su elaboración, es un cóctel complejo y delicioso. "La bala de plata", como también es conocido, es un trago simple, pero sofisticado que ha sobrevivido a muchas décadas sin ser destronado.
Para muchas personas quizá no sea tan importante saber quien fue el creador de éste exquisito trago. Pero lo que si es importante saber es que para disfrutar de una copa de Martini, se requiere de cierto respeto, es decir un Martini nuca se debe tomar en pijama.
Beber un buen Martini requiere de ciertos elementos como: la compañía, estar correctamente vestidos (elegantes) y si es posible con música de jazz o blues de fondo.
Cole Porter escribió memorables canciones muy adecuadas para el momento en que se desee disfrutarlo como: "Make It Another Old-fashion, Please", "Say It with Gin", "Absinthe Drip", "Cocktail Time" o "Drink, Drink, Drink".
Se recomienda también y para algunas personas es una obligación, acompañarlo de aceitunas, almendras saladas, otros.
La historia de éste elegante coctel, es bastante larga y no muy clara.
Algunos enólogos (conocedores de vinos), como el peruano Jaime Ariansen Céspedes, aseguran que el primer experimento se dio en Holanda en el año 1500 para crear una bebida medicinal compuesta de enebro y el zumo de bayas destiladas, maceradas en aguardiente.
La llamaron "ginebra" y tuvo muy buena aceptación.
Otras teorías ubican su origen en Italia, donde se mezcló ginebra con vermut, e Inglaterra, donde dicen adoptó su nombre del rifle Martini & Henry usado por el ejército británico, que daba un disparo seco, limpio y certero como el trago.
Sin embargo, hay quienes manifiestan que el inventor del Martini fue el profesor Jerry Thomas el barman (empleado) del hotel Occidental de San Francisco en 1860. Pero, los habitantes de un pueblo minero en California llamado Martínez, señalan que quien creo esta bebida fue su barman Julio Richelieu.
La costa este de los Estados Unidos no se ha querido quedar atrás y ellos también reclaman su invención. Aseguran que el mérito le corresponde a el neoyorquino Martini de Arma di Taggia en 1912, ya que sirvió este cóctel al millonario John D. Rockfeller, y le puso su propio nombre a este gran invento.
Existe una gran variedad de Martinis, que se pueden preparar con vermuts extra seco, seco rojo o blanco, y tipos de ginebras como las Beefeater, Tanqueray, Gordons y Bombay.
Para adornarlos se pueden utilizar aceitunas verdes, cebollitas cambray, cerezas, granos de café, violetas, espirales de cáscara de limón y hasta pétalos de rosa o de melón.
Martini dulce: Martini Malibú, licor marrasquino, jugo de cereza, un toque de limón y jugo de piña.
Martini Fusión: Martini Mosha, Vodka Stolichnaya, Controy, Licor 43 y licor de café. Se acompaña con granos de café.
Martini picante: Martini hot, Absolut Pepper, vermú seco, unas gotas de salsa Tabasco. Adornar con cebollita cambray.
Martini ácido: Martini acid, Absolut Citrön, Controy, cítricos, acompañado con una espiral de limón con zumo de lima.
Martini semi-acido: Martini mystique, Absolut Mandarin, jugo de arándano, jugo de limón y un toque de jarabe natural.
Como sabemos el Martini no es el único cóctel, hay para todos los gustos, sólo recuerda que cada uno tiene su momento y ocasión que lo convertirá en el mejor.
El Martini ha sido y sigue siendo tan popular que personas del mundo del entretenimiento, las artes y la política lo han disfrutado:
James Bond. El seductor espía de ficción no pierde ocasión para pedir su trago predilecto el Martini en casi todas las películas, más aún si la que lo sirve es una hermosa azafata, como en el filme "Another Day to Die".
Dean Martin. Este actor, cuyo verdadero nombre era Paul Dino Crocetti, formó la exitosa dupla con el cómico Jerry Lewis durante las décadas del 50 y 60 en Las Vegas. Tuvieron tanto éxito que los diseñadores de imagen sugirieron ponerle una copa de Martini en su mano, que además le iba perfecto con su nombre artístico. Ese cóctel y el cigarro fueron su marca registrada.
Franklin D. Roosvelt. El ex presidente de Estados Unidos (1933-1945) derogó la ley seca en 1933 y salió a brindar públicamente con un Martini. Se dice que a veces le agregaba un poco de anís o jugo de naranja.
Ernest Hemingway. Al célebre escritor y periodista le gustaba que su Martini tuviera 15 medidas de gin por una de vermú.
Samantha Jones, de Sex and the City. El personaje sexy de la famosa serie, encarnado por la actriz inglesa Kim Cattrall, le pregunta en un capítulo a su amiga Carrie: ¿Es Martini puro o tiene una mezcla? para saber si el hombre al que acababa de conocer era heterosexual o gay.