Penonomé y su Parque 8 de diciembre

Para todo penonomeño el Parque 8 de Diciembre es un lugar muy importante y especial puesto que es el área privilegiada donde se inician, desde épocas de antaño, las verdaderas actividades pueblerinas en la Ciudad de Penonomé.
Desde 1581 consta en cartas enviadas por Don Diego López de Villa Nueva y Zapata al Rey Felipe II de España, de la existencia de un poblado o caserío llamado Penonomé, atribuido dicho nombre a un jefe indio muerto por las armas de los españoles.
Enclavado entre la iglesia, hoy catedral San Juan Bautista, la Casa de Gobierno o Gobernación de la Provincia de Coclé, la Zona de Policía del poblado, la Casa de la Municipalidad, residencias y establecimientos públicos y privados comerciales, está el Parque 8 de Diciemrbe de Penonomé hoy día remozado en su totalidad gracias al esfuerzo visionario de hombres y mujeres conformados en la Asociación Pro Penonomé, convertido en Comité Restaurador de este lugar que ha dado gloria a esa región del interior del país.
Por ser centro de la comunidad zaratina, el Parque 8 de Diciembre de Penonomé ha sido para bien o para mal, lugar de un sin número de actividades tanto políticas como religiosas, culturales, económicas, amén, de ser por siempre, sitio de interés para citas amorosas.
El parque ha sido también centro obligado para recibir a quienes se mueven de un lado para otro de ese poblado coclesano. En fin, si me refiriera a cuantas actividades, tertulias, encuentros amorosos para nuevos romances o desventuras apasionadas ocurren, no alcanzarían páginas para ello. Pero sí puedo destacar la gigantesca labor responsable de educadores como Heraclio Quirós, Lea Tejeira de Parada, Arcecio Guardia, Olmedo Domingo, José Edgardo Quirós, Luis María Jaén, Emma Oberto y Moisés Tejeira, de entre otros, quienes hicieron posible que este Comité Restaurador diera corte final al remosamiento que desde 1997 inició labores para el bien de ese parque. Penonomeños y penonomeñas comprometidos, responsables, identificados con una noble causa dieron tiempo, esfuerzo, apoyo económico, ingenio, laboriosidad, junto a instituciones públicas y privadas para echar hacia delante esta titánica tarea.
Esta remodelación del parque aún incluye una fuente ya trazada pero no construida porque los recursos económicos para dicha obra deseada todavía no alcanzan. Se está a la espera del apoyo económico de otros tantos penonomeños que quieran y deseen costear algunas mejoras que hacen falta del parque de ésta, su patria chica.
Ha sido grande el esfuerzo de familias coclesanas, especialmente de raíces penonomeñas como la de Doña Carmen Madrid de Arias, progenitora de Arnulfo y Harmodio Arias Madrid, abuela de Doña Rosario Arias Galindo, Presidente de esta prestigiosa Casa Editora El Panamá América, así como la de la Embajada de Venezuela en Panamá, por familiares de nobles penonomeños desaparecidos como Estelina Tejeira, José P. Rodríguez, Pascual Quiróz, Víctor Tejeira, Ricardo J. Alfaro, R. Suárez y N. Vásquez, José E. Lefevre, Enriqueta Henne, Noe Lorenzo, Rosa Q. De Martín, Tomás Monasterio, Carlos George, Miguel A. Grimaldo, y de otras tantas empresas públicas y privadas quienes han sembrado satisfacción a esa comunidad prohijándole, hoy día, de un área propia para el recreo y solaz esparcimiento por las bancas ya instaladas.
Históricamente el Parque 8 de Diciembre de Penonomé forma y toma vida desde 1821, pasando por remodelaciones en 1908 gracias al esfuerzo de Don José E. Lefevre y Don Miguel W Conté. Más adelante, en 1912 Don Antonio Suarez da un toque especial construyéndole un kiosco de madera, mejorando de igual modo jardines, instalando bancas centrales obsequiadas por lugareños y por la propia municipalidad.
Puede decirse que en 1936, bajo la administración del entonces Presidente de la República Dr. Harmodio Arias Madrid y siendo Alcalde Don José Ponciano Rodríguez, se consolidan nuevamente las construcciones del parque proviéndole de un Gazebo de concreto (antiguo kiosco) para llenar de mayor esplendor y lucidez a las retretas que se desarrollaban en el referido lugar.
Engalanado y con esplendor propio para el Parque 8 de Diciembre de Penonomé está ya para ser visitado, utilizado y cuidado por propios y extraños, está para recibir cultura, para ofrecer un área de solaz esparcimiento para la lectura, meditación, convivencia pacífica, para estos tiempos de violencia.
Bendecido por la presencia a pocos pasos de la Catedral de Penonomé, el Parque 8 de Diciembre acoge nuevamente en su seno al pueblo penonomeño y a sus visitantes para que se recreen mañana, tarde o noche.
Una vez restaurado invita a que celosamente lo cuiden, que no lo olviden, y que de manera altruista todos contribuyamos a que su uso no se convierta en "plaza de jolgorio desenfrenado, que no merece la comunidad", tal y como lo solicitó el Profesor Heraclio Quirós al momento de dirigirse a los presentes cuando el pasado domingo 29 de octubre se entregaba a la comunidad penonomeña ese hermoso sitio ya restaurado.
Aún guardo fresco en mi memoria mi vida de infante, de cuando jugaba y corría por ese parque citadino durante fiestas apoteósicas como la del día de la madre, las fiestas patronales del 15 de diciembre, de Semana Santa, Santa Rosa de Lima y otras efemérides montadas y organizadas por autoridades civiles y eclesiásticas de los años 50 y 60.
Como penonomeño comprometido con estas buenas acciones hago un llamado, un exhorto, para que otros penonomeños que al igual que yo y que vivimos con nuestras familias lejos de ese terruño, hagamos un Parque 8 de Diciembre para que se pueda culminar con esta obra ya iniciada en los detalles adicionales que se le quiere hacer a la misma.
Se está a la espera de penonomeños altruistas, cooperadores, filántropos, con deseos de respaldo económicamente y cumplir una buena acción, con ese pedazo de tierra interiorana que les vio nacer.